Actualizado 24/03/2006 13:48

Iberoamérica.- Rumí dice que reducir un 1% el coste de las remesas supondría para los receptores 28 millones más al año

Pide no caer en el "espejismo" de que los inmigrantes y sus remesas son los únicos responsables del desarrollo de sus países de origen


MADRID, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -

La secretaria de Estado de Inmigración y Emigración, Consuelo Rumí, abogó hoy que seguir reduciendo el coste del envío de remesas en los próximos años ya que, según destacó, sustraen de manera "excesiva" los márgenes de inversión productiva, aunque aclaró que no puede caerse en el "espejismo" de que la responsabilidad central en el desarrollo de los países receptores recae sólo en los inmigrantes.

"En los últimos años se han reducido los costes pero la tendencia debe de ser acusada en mayor medida", afirmó Rumí esta mañana en la inauguración del seminario 'Remesas y desarrollo en Iberoamérica', auspiciado por la Organización de Estado Iberoamericanos (OEI) para la Educación, la Ciencia y la Cultura, la fundación 'remesas.org', y el Grupo Santillana.

Durante su intervención, Rumí reveló que la reducción de un 1 por ciento del coste del envío de las remesas desde España implicaría que las familias destinatarias en sus países de origen recibirían en torno a 28 millones de euros más al año, aunque dejó claro que para que esto sea posible los Gobiernos, incluido el español, tienen que comprometerse.

APUESTA DE ESPAÑA

En este punto, subrayó que el Gobierno español ha apostado de manera decidida por la promoción de la cooperación al desarrollo, tras resaltar que en dos años han aumentado un 62 por ciento los recursos para programas de desarrollo, lo que demuestra que España tiene una "clara voluntad política" de promover la cooperación, acompañada por su materialización presupuestaria.

Rumí continuó su intervención diciendo que un primer resultado casi automático del envío de las remesas es la reducción de la pobreza y el segundo, canalizado de manera adecuada, debería ser el de representar una importante fuente de financiación para el desarrollo de esos países. "Y al Gobierno español le satisface poder contribuir a materializar ese desarrollo", insistió.

También aconsejó que la canalización de las remesas gane aún más presencia en las agendas políticas nacionales e internacionales --en 2005 las remesas habían superado los 250 billones de dólares en todo el mundo-- y que cobre protagonismo en el debate político porque, según subrayó, la complicidad de las instituciones es importante para promover el vínculo entre las remesas y desarrollo.

Asimismo, la secretaria de Estado destacó que entre 1994 y 2004 las remesas enviadas desde España oficialmente pasaron en valor absoluto de 312 millones de euros a 3.436 millones, coincidiendo con el momento más importante del fenómeno migratorio en el país, cuando se pasó de 500.000 extranjeros con tarjeta de residencia a más de 2,7 millones.

"ESPEJISMO"

Aunque resaltó el papel de las remesas en el desarrollo de los países receptores, pidió no caer en el "espejismo" de que la responsabilidad central sobre el desarrollo económico y social de esos países recaiga exclusivamente en los inmigrantes. "Es un planteamiento erróneo porque la responsabilidad fundamental es de los Gobiernos", indicó.

En el mismo sentido se pronunció la diputada socialista Delia Blanco, presidenta de la Comisión de Cooperación Internacional para el Desarrollo del Congreso, quien reconoció que tiene "dudas" sobre la posibilidad de que se legisle sobre este asunto, ya que desde el ámbito parlamentario no se puede decir a los inmigrantes que son corresponsables del desarrollo de sus países.

Por su parte, el secretario de Cooperación Iberoamericana de la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB), el mexicano Miguel Hakim, consideró que los distintos gobiernos tienen que promover la competencia entre las empresas dedicadas al envío de remesas para seguir reduciendo los costes, así como promover reformas junto a los otros actores para lograr ese objetivo.