Actualizado 28/09/2015 14:41

El independentismo catalán gana en escaños pero no en votos

    MADRID, 28 Sep. (EUROPA PRESS) -

    El independentismo ha sumado este domingo mayoría absoluta en escaños en las elecciones autonómicas celebradas en Cataluña (España) a las que los soberanistas habían dado carácter plebiscitario. Sin embargo, se han quedado por debajo del 50 por ciento de los votos.

   La coalición de la que Artur Mas, actual presidente de la Generalitat, formaba parte ha fracasado al quedarse con 62 escaños, 9 menos que la suma de CiU y ERC en 2012 --que tenían 71 escaños-- y tanto su futuro como su proyecto dependerá de los 10 escaños que ha logrado la CUP, sumando 7 a los que ya tenía.

   Uno de los grandes ganadores de la jornada ha sido Ciudadanos, que ha subido de manera espectacular al pasar de 9 escaños a 25; el PSC, liderado ahora por Miquel Iceta, ha registrado una rebaja de 4 escaños y se ha situado en los datos que le daba la encuesta del CIS, 16 parlamentarios; el PP se ha hundido al pasar de 19 diputados autonómicos a 11, mientras que Cat Sí que es Pot, el partido respaldado por Pablo Iglesias, se ha quedado muy por debajo de los resultados obtenidos por ICV --una de las fuerzas que integraban esta coalición-- hace tres años: entonces fueron 13 y ahora, 11.

   A pesar de las palabras de Artur Mas, tras conocer los resultados electorales, en las que aseguraba que el independentismo ha ganado en estos comicios, lo cierto es que la suma del resultado de los partidos independentistas se ha quedado por debajo de los obtenidos en los comicios de 2012, tanto en escaños como en votos. Sí es cierto que en escaños logran, junto con la CUP, mayoría absoluta en el Parlamento, si a los 62 escaños de Junts se suman los 10 de la formación de Antonio Baños.

   Pero también lo es que si se cuentan escaños como quería Artur Mas, éste número es menor que el que sumaban en 2012, que era de 74, y ahora son 72. Y si lo que se cuentan son los votos, el porcentaje también es menor, y además está por debajo del 50 por ciento.

   Hace tres años, los independentistas catalanes sumaban el 49,18 por ciento de los apoyos, mientras que hoy, con el 97,03 por ciento de votos escrutados, suman el 47,83 por ciento. Es decir, que han perdido cerca de un 1,5 por ciento de los votos que estaban a favor de la independencia.

FRACASO DE JUNTS PEL SI

   Pero si además, el análisis se hace centrándose en la coalición encabezada por Raúl Romeva y en la que el presidente de la Generalitat iba en cuarto puesto, el fracaso es aún mayor. En los comicios de hace tres años CiU logró 50 escaños y ERC 21. Entre las dos fuerzas sumaban 71 diputados en el Parlamento catalán y ahora yendo juntos y sumando también a otras fuerzas minoritarias han logrado sólo 62, es decir, 9 menos que hace tres años.

   Además, CiU y ERC se han dejado más de 200.000 votos en estos comicios que han batido récords de participación en unas elecciones catalanas, en el entorno de 77,5 por ciento y teniendo en cuenta que la coalición de Junts se presentaba con el lema "el voto de tu vida".

   El gran fracaso de esta coalición ha sido significativo en Barcelona, donde han votado 3 millones de personas (de los 5,5 millones que estaban convocados en toda Cataluña). En esta provincia, el independentismo no ha llegado ni al 45 por ciento, se ha quedado en el 44,77 por ciento, logrando 39 escaños, frente a los 46 del resto de las fuerzas políticas.

EL FUTURO DE MAS Y SU PROYECTO DEPENDE DE LA CUP

   Con estos resultados, el futuro del presidente de la Generalitat ha pasado a depender de la fuerza política que lidera Antonio Baños, y que ya ha dejado claro que no apoyará con sus votos la investidura de Mas como presidente.

   Y tampoco podrán permitir que Artur Mas sea president con su abstención, ya que el resto de partidos no independentistas suman 63, es decir, un escaño más que la coalición de Junts pel sí. No obstante, también se pueden abrir otros escenarios como la opción de que la CUP pueda plantear su apoyo a Oriol Junqueras o al propio Raúl Romeva para presidir el Gobierno catalán.

   Pero no es sólo el futuro de Artur Mas el que está en juego, también lo está el proyecto soberanista, ya que los integrantes de la CUP han repetido hasta la saciedad que sería suficiente con el 50 más uno para seguir por la senda independentista, aunque en un marco comparativo creen que lo normal sería lograr el 55 por ciento. Pero ni un porcentaje, ni el otro se han dado en estas elecciones, ya que la suma del voto independentista se queda por debajo de ese 50 por ciento.

CIUDADANOS, EL GANADOR DEL 27S

    Los grandes ganadores del 27S han sido los del partido de Albert Ribera, Ciudadanos, que no se presentó en esta ocasión como cabeza de lista en estos comicios cediendo el puesto a Inés Arrimadas. Este partido ha pasado de 9 a 25 escaños, es decir, de 275.007 votantes (el 7,57 por ciento), a casi 714.902 (cerca del 18 por ciento).

   Miquel Iceta, el nuevo líder del PSC, quien sorprendió en la campaña por lanzarse al bailar a ritmo de Queen (Don't stop me now), hizo gala del título de la canción al conseguir salvar los muebles en su partido y sacar 16 escaños, lo que pronosticaba el CIS, aunque también se ha dejado algunos pelos en la gatera porque ha perdido 4 escaños, aunque la pérdida de votos no ha sido tan grande, en el entorno de los 17.000. Sin embargo es el peor resultado histórico del PSC en unas autonómicas.

LOS BATACAZOS: EL PP Y CATALUÑA SI QUE ES POT

   Otro de los grandes batacazos de la jornada han sido para el Partido Popular, que logra 11 escaños, y para Cataluña sí que es pot, respaldada por Podemos y que ha conseguido otros 11 diputados en el Parlamento catalán.

   El candidato recién estrenado de los populares, Xavier García Albiol no ha logrado alcanzar los resultados de su predecesora, Alicia Sánchez Camacho, a pesar de que ha contado con el desembarco de Mariano Rajoy y buena parte del Gobierno en su campaña electoral, además de un spot de última hora en el que varios dirigentes del PP se lanzaban a hablar en catalán. Albiol ha perdido más de 150.000 votos pasando de ser la cuarta fuerza en el Parlament a la penúltima de seis por delante de la CUP, con tan sólo el 8,5 por ciento de los apoyos.

   Tampoco ha surtido efecto positivo la irrupción de Podemos en la candidatura de Cataluña sí es Pot, que lideraba Lluis Rabell, de la que también formaba parte ICV y EUiA. De hecho, han logrado menos escaños que los 13 que recabó ICV hace tres años, quedándose con 10, aunque el número de votos que han perdido no es tan alto, unos 3.000.

   El trabajo desplegado por Pablo Iglesias en esta campaña electoral no ha servido para ganar apoyos a la coalición de Rabell, a pesar de que entre sus objetivos estaba conseguir un buen resultado que le sirviera de catapulta para las próximas elecciones generales de diciembre. El resultado es muy inferior al que obtuvo Podemos en las últimas autonómicas en toda España, donde rondó una media del 15 por ciento de los votos.