ROMA, 4 Ago. (EUROPA PRESS) -
El banco italiano Intesa Sanpaolo cerró el primer semestre de 2020 con un beneficio neto de 2.566 millones de euros, lo que se corresponde con un incremento del 13,2% en comparación con el mismo periodo del año pasado, según las cuentas publicadas este martes por la entidad.
La facturación entre enero y junio se mantuvo estable en 9.075 millones de euros. De esa cifra, los ingresos netos por intereses descendieron un 0,6%, hasta 3.497 millones, mientras que los obtenidos por comisiones y tasas descendieron un 6,3%, hasta 3.588 millones de euros.
De su lado, la facturación del negocio de seguros creció un 17,4%, hasta 736 millones de euros, mientras que los ingresos cambio de valor contable de activos financieros se situaron en 1.257 millones, un 15,1% más.
Por segmentos de negocio, la división de banca minorista observó una cifra de negocios de 3.975 millones hasta junio, un 4,1% menos, mientras que la rama de banca corporativa y d inversión creció un 29,2%, hasta 2.594 millones de euros.
Las filiales internacionales de Intesa Sanpaolo contabilizaron 939 millones de ingresos, un 4,8% menos, al tiempo que el negocio de banca privada descendió un 0,7%, hasta 955 millones, y el de gestión de activos se situó en 355 millones, un 2,5% menos. La división de seguros, en cambio avanzó un 12,8%, hasta facturar 670 millones de euros en el semestre.
De su lado, los gastos de persona descendieron un 2,5% en el periodo que fue de enero a junio, hasta 2.736 millones de euros, al tiempo que el resto de costes administrativos se contrajeron un 6,3%, hasta 1.136 millones.
Únicamente en el segundo trimestre de 2020, Intesa Sanpaolo obtuvo un beneficio neto de 1.415 millones de euros, un 16,4% más, mientras que los ingresos descendieron a 4.136 millones de euros, un 11,5% menos.