MADRID, 4 May. (EUROPA PRESS) -
La estabilidad económica y la búsqueda de empleo son las principales preocupaciones de los jóvenes iraquíes, según una encuesta coordinada entre el Gobierno y la ONU en la que se entrevé una sociedad cada vez más igualitaria en términos de género.
La de Irak está considerada la tercera población más joven del mundo y una de las de mayor crecimiento. Se estima que dentro de una década adolescentes y jóvenes sumen 16,4 millones de personas, un 31 por ciento de la población, por lo que distintos actores han unido sus fuerzas para escuchar sus voces.
Unos 33.000 ciudadanos de entre 10 y 30 años han participado en este sondeo, que se ha extendido por todas las provincias entre febrero y abril. El último estudio de este tipo tuvo lugar en 2009 y, con él, tanto el Gobierno central como las autoridades de la región semiautónoma del Kurdistán quieren pulsar la opinión de quienes están llamados a ser el futuro del país árabe.
La coordinadora humanitaria de la ONU, Marta Ruedas, ha subrayado que "los jóvenes son innovadores, creadores, constructores y líderes del futuro", pero solo pueden alcanzar "todo su potencial" si tienen herramientas a su alcance, "un sistema adecuado que cubra sus aspiraciones", según un comunicado de la organización internacional.
Un 39 por ciento de las personas encuestadas ha reconocido su preocupación por su situación económica y por las perspectivas de encontrar trabajo. No en vano, Irak tiene una de las mayores tasas de desempleo juvenil de todo Oriente Próximo, hasta el punto de que más de una cuarta parte de los jóvenes no tienen trabajo.
Por otra parte, el estudio refleja que el 70 por ciento rechazan la violencia en sus relaciones de pareja, 16 puntos más que el sondeo realizado hace más de una década. Un 83 por ciento de los jóvenes cree que las decisiones sobre la familia deben tomarlas la pareja en su conjunto y no solo los hombres.
El representante en Irak del Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA), Oluremi Sogunro, ha señalado que, a tenor de estos datos, "los jóvenes de Irak se están abriendo a la igualdad de género y desean políticas que cumplan sus aspiraciones", por lo que ha emplazado a las autoridades, con ayuda de la ONU, a recoger el guante.