Publicado 04/12/2019 14:14

Irak.- HRW denuncia que las fuerzas de seguridad iraquíes siguen usando fuerza letal contra los manifestantes

MADRID, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -

Human Rights Watch (HRW) ha denunciado que las fuerzas de seguridad iraquíes han seguido usando la fuerza letal contra los manifestantes en el país, a pesar de la orden del primer ministro en funciones, Adel Abdul Mahdi, en sentido contrario por lo que ha pedido medidas urgentes para acabar con esta situación.

Así, desde la organización han recordado que el Parlamento iraquí aceptó la dimisión de Abdul Mahdi debido a las manifestaciones que estaban desarrollándose en el país. También, han subrayado que el contraste entre sus afirmaciones y el aumento del número de muertos en las protestas, especialmente en la parte sur del país, han acrecentado la preocupación de que el Gobierno sea "incapaz de controlar" el uso abusivo de la fuerza.

"El Gobierno necesita poner fin a las muertes ilegales y explicar por qué no puede controlar sus propias fuerzas", ha afirmado la directora de HRW para Oriente Próximo, Sarah Leah Whitson.

En este punto, HRW ha recordado que un portavoz del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos señaló el pasado 29 de noviembre que al menos 354 personas han muerto y 8.104 han resultado heridas en las protestas que comenzaron en Irak el pasado 1 de octubre. Además, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, condenó el uso de las armas contra las manifestantes en el país.

Por otro lado, la ONG se ha referido a la muerte de al menos 16 manifestantes en Nayaf el 28 de noviembre, a lo que se suman tres más del día siguiente. Asimismo, ha denunciado que las fuerzas de seguridad abrieron fuego contra los manifestantes, después de quemar el consulado iraní en Nayaf.

Además y también el 28 de noviembre, han señalado que la División de Respuesta a Emergencias del Ministerio del Interior abrió fuego contra los manifestantes desarmados que estaban realizando una sentada en Nasiriya, donde abatieron al menos a 25 personas y 160 resultaron heridas.

RECOMIENDAN INVESTIGAR A LOS OFICIALES ENCARGADOS

Por otro lado, la ONG ha detallado que hasta el momento ha habido dos procesamientos de oficiales de seguridad. En concreto, los medios locales informaron de que un oficial iraquí fue condenado a pena de muerte por la muerte de manifestantes en Wasit, al sureste de Bagdad, y que otro fue sentenciado a siete años de prisión.

"Human Right Watch se opone a la pena de muerte en todos los países y bajo todas las circunstancias", ha sostenido la ONG y ha añadido que se tiene que investigar a los oficiales encargados de la seguridad.

Asimismo, han afirmado que según una carta enviada por la Embajada de Beirut a la ONG, Adel Abdul Mahdi había recomendado prohibir el uso de la munición contra los manifestantes "bajo toda circunstancia" y que había ordenado a las fuerzas de seguridad su desarme, así como que les había dado instrucciones para ser "pacientes" con los manifestantes.

Sin embargo, desde la organización han asegurado que lo que se dice en la carta contradice los hechos que han ocurrido en ciudades como Nayaf, Nasiriya, Basora, Muthanna o Bagdad, donde han asegurado que militares y fuerzas de seguridad han abierto fuego contra las personas que estaban protestando en las calles. "El Gobierno debe aclarar a la población iraquí si las fuerzas de seguridad han ignorado las órdenes del primer ministro", han apuntado desde HRW.

"SE DEBE INVESTIGAR CADA MUERTE"

Por ello, HRW ha defendido que si las fuerzas de seguridad han actuado en contra de las órdenes del Gobierno, el Ejecutivo debería de condenar las "muertes ilegales" de manifestantes y remitir estos casos a la justicia para que investigue lo sucedido.

"Las autoridades deben investigar cada muerte cometida por las fuerzas de seguridad", ha reivindicado la organización, para lo que se tiene que contar con la ayuda de expertos internacionales si es necesario. "Esos investigadores deben de ser rápidos, justos e independientes", ha expresado.

Por último, HRW ha asegurado que el Gobierno de Irak ha decidido "esconderse" detrás de sus afirmaciones al asegurar que han ordenado que paren los asesinatos, pero ha mantenido que mientras este Gobierno siga en el poder es "responsable" de lo que está sucediendo.