Publicado 13/02/2020 16:30

Irak.- Mueren tres personas y siete resultan heridas en un ataque de Estado Islámico en el norte de Irak

MADRID, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -

Al menos tres personas murieron y otras siete resultaron heridas en un ataque ejecutado en la noche del miércoles por el grupo yihadista Estado Islámico contra una localidad situada en la provincia iraquí de Diyala (norte).

Fuentes militares kurdas han detallado que los fallecidos en el ataque contra la aldea de Bahari Taze son un miembro de los peshmerga --las fuerzas de seguridad kurdas--, un soldado iraquí y un civil.

"Un grupo de milicianos de Estado Islámico atacaron el vehículo de un peshmerga que estaba de guardia en la oficina del Partido Democrático del Kurdistán (PDK) en Janaqin, matándole", ha señalado el teniente coronel Ahmed Mustafá.

"Después de que los residentes escucharan los disparos y los gritos, fueron a la zona. Los milicianos abrieron fuego cuando se retiraban, matando a un civil e hiriendo a otros cuatro", ha agregado, según la cadena de televisión kurda Rudaw.

Posteriormente, un grupo de militares que se encontraba en un puesto de observación cercano se dirigió a la zona en vehículo, pasando por encima de una mina antipersona, un incidente que se saldó con un soldado muerto y otros tres heridos.

Irak declaró el 9 de diciembre de 2017 el "fin de la guerra" contra Estado Islámico en el país, después de que los militares recuperaran los últimos bastiones que aún permanecían bajo control de la organización yihadista.

Sin embargo, Estado Islámico ha continuado perpetrando atentados de forma prácticamente diaria en distintos puntos del país, entre ellos la capital, Bagdad, y sus alrededores.

Las autoridades de Irak anunciaron el 23 de enero el reinicio de las operaciones contra el grupo yihadista junto a la coalición internacional que encabeza Estados Unidos, suspendidas tras la muerte del general iraní Qasem Soleimani en un bombardeo estadounidense en Bagdad.

La suspensión de las operaciones provocó preocupación entre los miembros de la coalición debido al impacto en la lucha antiterrorista, en un momento en el que Estado Islámico intenta reagruparse y ganar fuerza tras su derrota territorial en Irak y Siria.