Publicado 04/12/2019 00:32

Irak.- La ONU dice que Irak "está en una encrucijada" y pide medidas urgentes para poner fin a la crisis

MADRID, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -

La representante especial de Naciones Unidas para Irak, Jeanine Hennis-Plasschaert, ha afirmado este martes que el país "está en una encrucijada" y ha pedido a la clase política que una fuerzas para sacar al país de la crisis que atraviesa.

En una comparecencia ante el Consejo de Seguridad de la ONU, Hennis-Plasschaert ha denunciado que más de 400 personas han muerto y cerca de 19.000 han resultado heridas en el marco de las protestas que estallaron a principios de octubre y ha hecho hincapié en la necesidad de celebrar elecciones "libres, justas y creíbles", hacer frente a la corrupción y crear condiciones para reducir el desempleo.

Durante la jornada de este martes, el presidente del Parlamento, Mohamed Halbusi, ha pedido al presidente del país, Barham Salí, que designe a un nuevo ministro, para lo que tendrá 15 días. Tras ello, se abrirá un plazo de 30 días para formar el nuevo gobierno.

Por ello, Hennis-Plasschaert ha recalcado "la urgencia, en las actuales circunstancias" de que el proceso logre avances rápidamente. "Los líderes políticos no tienen el lujo del tiempo y deben estar a la altura", ha dicho.

Así, ha incidido en que tienen que "sacar adelante soluciones reales, en lugar de dejarlas en manos de un primer ministro con pocos o ningún apoyo". "Es una responsabilidad de la clase política en su conjunto", ha argüido.

"La situación no puede resolverse ganando tiempo y con soluciones cosméticas y medidas coercitivas. Esta postura sólo incrementará la ira pública y la desconfianza", ha alertado.

En este sentido, ha manifestado que "perseguir intereses partidistas y la brutalidad en la represión de las protestas pacíficas no son estrategias, y nada es más dañino que un clima de ira y miedo". "No debemos dejar que la historia se repita", ha alertado.

"Tras cualquier crisis pueden surgir nuevas y grandes oportunidades. Irak no es una causa perdida. En absoluto, tiene un potencial inmenso", ha dicho, antes de agregar que "el desafío es aprovechar esta oportunidad y construir un Irak soberano, estable, inclusivo y próspero".

Hennis-Plasschaert ha recordado que las protestas estuvieron encabezadas por los jóvenes en un momento para "dar voz a su frustración con la mala situación económica y las expectativas sociales y políticas".

"Dar voz a sus grandes esperanzas para tiempos mejores. Alejados de la corrupción y los intereses partidistas. Alejados de la interferencia extranjera", ha sostenido. "Todo lo que piden es un país que alcance todo su potencial en beneficio de los iraquíes", ha añadido.

De esta forma, ha lamentado que "están pagado un precio inimaginable para que se escuchen las voces" y ha puntualizado que "estos jóvenes no saben cómo de horrible fue la vida para muchos iraquíes durante los tiempos de Sadam Hussein, pero son muy consciente de la vida que se les prometió tras (la caída del régimen de) Sadam Hussein".

"ACUMULACIÓN DE FRUSTRACIÓN"

"Lo que estamos presenciando es una acumulación de frustración por la falta de progresos durante muchos años. Tras años, incluso décadas, de conflicto sectario y conflicto, hay un nuevo sentido de patriotismo", ha subrayado.

Por ello, ha criticado el "uso excesivo de la fuerza" y la "crisis de confianza" provocada por la respuesta de las autoridades a las protestas, antes de decir que los paquetes de reformas anunciados han sido recibidos por los manifestantes como "poco realistas o 'muy poco y muy tarde'".

Hennis-Plasschaert ha solicitado además que las autoridades aclaren quién ha estado detrás de la violencia en las protestas, haciendo referencia directa a "enmascarados", "francotiradores no identificados" y "actores armados desconocidos".

Asimismo, ha puntualizado que "el cierre de medios de comunicación, Internet y las redes sociales se suman a la percepción pública de que las autoridades tienen algo que ocultar" y ha denunciado las "dinámicas de poder" que "intentan secuestrar las protestas pacíficas".

"Los actos de violencia motivados políticamente, por las bandas o por lealtades externas, podrían poner a Irak en una trayectoria peligrosa", ha dicho, al tiempo que ha indicado que "esto socava gravemente las demandas legítimas del pueblo iraquí".

"Esto da una cínica excusa para la inacción política o algo peor, una excusa para todo tipo de conspiraciones que justifiquen la represión violenta de las manifestaciones políticas", ha dicho. "La inmensa mayoría de los manifestantes son evidentemente pacíficos", ha recalcado.

Por último, Hennis-Plasschaert ha argüido que "algún tipo de estructura y coordinación de parte de los manifestantes pacíficos sería de gran importancia" para permitir articular una respuesta a la situación que saque al país de la crisis.