Publicado 13/11/2019 22:30

Irán.- Irán se muestra dispuesto a "hacer todo lo posible" para un proceso de diálogo con los países de la región

MADRID, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno de Irán se ha mostrado este miércoles dispuesto a "hacer todo lo posible" para iniciar un proceso de conversaciones con los países de la región a fin de rebajar las tensiones en la zona.

"La idea de formar un foro para un diálogo regional y (lograr) un tratado de no agresión, así como la presentación de la 'Iniciativa de Paz de Ormuz' (...) por parte del presidente de Irán se enmarcan en este contexto", ha dicho el portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, Abbas Musavi.

Así, ha resaltado que Teherán "espera que los países regionales se unan a la iniciativa e inicien conversaciones regionales exhaustivas, en un intento por erradicar las causas de las divisiones en la región y adoptar medidas prácticas, serias y efectivas para resolver la crisis regional".

Las declaraciones de Musavi han llegado pocos días después de que las autoridades de Emiratos Árabes Unidos (EAU) pidieran a las autoridades iraníes que aparquen sus diferencias con los países árabes y Estados Unidos para negociar un nuevo régimen de convivencia que reduzca la tensión regional y reactive la economía iraní.

En este sentido, el ministro de Estado emiratí para Asuntos Exteriores, Anwar Gargash, declaró que "en este punto en el que estamos no sirve de nada inflamar todavía más la situación", sobre todo en pleno resquebrajamiento del acuerdo nuclear de 2015 entre Irán y las potencias internacionales.

"Somos de la opinión, tajante, de que todavía hay espacio para que la diplomacia colectiva acabe triunfando ante la falsa elección que hay entre la guerra y el acuerdo nuclear, por fallido que resulte", añadió.

Por eso, Gargash pidió una negociación más amplia que incluya no solo el acuerdo nuclear, sino el programa balístico, en general, de Irán y sus incursiones en conflictos internacionales como Yemen, una guerra por terceros que le enfrenta a Arabia Saudí a través de los dos bandos en conflicto: el Gobierno yemení que respalda Riad y los rebeldes huthis, a los que Teherán auxilia.

Frente a la estrategia de "máxima presión" sobre Irán que está emprendiendo la Casa Blanca, Gargash propuso en su lugar "un camino al acuerdo que incluya a todas las partes, aunque para ello hará falta paciencia y valor, porque va a ser largo, y necesitaremos que Estados Unidos y la comunidad internacional se pongan de acuerdo".

La tensión en el Golfo ha aumentado desde los ataques a los petroleros de este verano y el asalto contra unas instalaciones energéticas de Arabia Saudí. Washington responsabiliza a Teherán de estar detrás de estas operaciones, acusaciones que la república islámica niega con vehemencia.