TEHERÁN, 11 Abr. (DPA/EP) -
El Parlamento iraní ha decidido presentar cargos este domingo contra el presidente del país, Hasán Rohani, por ignorar leyes aprobadas por la cámara en lo que, según observadores internacionales, podría tratarse de una amonestación por sus esfuerzos para reactivar el acuerdo nuclear con la comunidad internacional.
La agencia de noticias iraní Fars ha informado de que 190 de los 235 diputados de la cámara han votado a favor de la presentación de cargos, sin dar más detalles, pero expertos consultados por la agencia DPA vinculan la votación con la reactivación de las conversaciones nucleares en Viena.
En cualquier caso, esta votación es un episodio más de la tensión reinante entre Rohani, considerado un reformista moderado, y los elementos más conservadores del Parlamento, estrechamente vinculados al estamento clerical del país, quienes llegaron a pedir la dimisión del presidente tras su victoria en las elecciones legislativas del año pasado.
Por su parte, Rohani acusa a los extremistas en el Parlamento de sacrificar el interés nacional en beneficio de sus intereses y sus luchas de poder internas conforme se aproximan las elecciones presidenciales de junio.
Rohani no tiene perspectiva de comparecer a estas elecciones tras pasarse dos mandatos al frente del país pero los observadores de DPA no descartan que esta maniobra del Parlamento sea un ardid para desanimar a otros candidatos moderados que quisieran presentarse.
La comisión conjunta del acuerdo nuclear iraní completó este viernes en Viena la primera ronda del proceso para facilitar la vuelta de Estados Unidos al pacto y, tras una reunión positiva, se ha citado la próxima semana para continuar los trabajos.
La UE, que ejerce de coordinador de la comisión de seguimiento del acuerdo nuclear, ha apuntado que los grupos de expertos han informado a las partes sobre las posibilidades para garantizar la implementación nuclear y levantar sanciones que Estados Unidos decidió reanudar contra la república islámica después de que el entonces presidente Donald Trump abandonara el pacto en 2018.