JERUSALÉN, 9 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Comité Central del partido conservador Likud ha votado a última hora de este domingo la cancelación de las primarias internas, por lo que Benjamin Netanyahu se mantendrá al frente de la formación por el momento pese a estar siendo investigado por corrupción.
Solo se votará a un nuevo líder del partido en el caso de que no se forme gobierno antes de la medianoche del miércoles, fecha límite antes de que se convoquen automáticamente nuevas elecciones, las terceras en menos de un año, por la falta de un candidato con el suficiente apoyo para la investidura en la Knesset o Parlamento israelí.
Los analistas creen que lo más probable es que las primarias se celebren tras la navidad judía, prevista para el 30 de diciembre, pero no hay una fecha concreta. A estas primarias concurrirían Netanyahu y el diputado Gideon Saar.
"No es solo una expresión de los derechos de un miembro del partido. Es un deber consagrado en las normas del partido", ha asegurado Saar en su intervención ante el Comité Central, interrumpida con abucheos por partidarios de Netanyahu.
"Se puede competir con quien ha estado 14 años al frente del Gobierno de Israel. Los intentos de deslegitimar y difamar a quienes quieren presetnarse van en contra de la naturaleza democrática y la tradición del Likud", ha remachado.
La propuesta de aplazar las primarias la planteó el propio Netanyahu para evitar que los candidatos situados en la parte baja de la liste se fuguen hacia el partido Kahol Lavan. Además permitirá aprobar un cambio en la normativa para que los diputados no tengan que ser necesariamente ministros y den paso así a candidatos de la parte baja de la lista una vez nombrados.