Publicado 15/06/2023 11:23

Israel no impondrá medidas disciplinarias al militar que mató a tiros a un niño palestino de dos años en Cisjordania

Archivo - Imagen de archivo de soldados de Israel en Nablús, Palestina.
Archivo - Imagen de archivo de soldados de Israel en Nablús, Palestina. - Nasser Ishtayeh/SOPA Images via / DPA - Archivo

El Ejército incide en una "mala identificación" de los objetivos tras unos disparos contra un asentamiento cerca de Nabi Salé

MADRID, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -

El Ejército de Israel ha anunciado que no adoptará medidas disciplinarias contra el soldado que mató este mes a tiros a un niño palestino de dos años e hirió a su padre en la localidad cisjordana de Nabi Salé y ha reiterado que abrió fuego contra ellos pensando que habían efectuado disparos contra él tras un incidente de seguridad en un asentamiento cercano.

El niño, identificado como Mohamed Haizam Tamimi, resultó herido de bala en la cabeza cuando se encontraba en un vehículo junto a su padre, un incidente que el Ejército describió como un accidente después de que militares se desplegaran en la zona por los disparos contra el asentamiento de Neve Tzuf, suceso que se saldó sin víctimas.

El Ejército israelí ha publicado en su página web un comunicado tras completar su investigación sobre el suceso y ha reseñado que "las fuerzas en una posición respondieron disparando en varias ocasiones como resultado de una mala identificación de la fuente de los disparos" y ha defendido que las pesquisas han sido "exhaustivas".

"A raíz de las conclusiones de la investigación, parece que un vigilante informó de que había identificado a dos terroristas disparando contra el asentamiento y la posición. La fuerza que se desplazó a la posición recibió el informe y escuchó los disparos, pero no identificó la fuente de los mismos", ha detallado.

Así, ha reseñado que "un militar de la compañía llegó al lugar y empezó a supervisar la zona de la localidad para ubicar a los terroristas". "Durante la búsqueda, detectó un vehículo sospechoso y realizó disparos al aire, violando las órdenes", ha manifestado, antes de agregar que en ese momento "se detectó la huida de los terroristas".

"En ese momento, un militar que estaba en una posición cerca de la aldea identificó a dos personas entrando en un coche y pensó que eran los terroristas que huían del lugar y que estaban disparando contra él desde el vehículo. Tras recibir permiso de su comandante, disparó contra el vehículo", ha puntualizado.

En este sentido, ha hecho hincapié en que "la investigación ha revelado que la secuencia de acontecimientos y el que escuchara disparos durante la operación provocaron que el militar pensara que eran disparos efectuados por los terroristas durante su huida".

Por ello, ha incidido en que "la investigación ha detectado lapsos en la cadena de mando y control durante el incidente, así como en los informes y las conversaciones entre las fuerzas sobre el terreno, lo que llevó a una mala toma de decisiones", motivo por el que habrá una "reprimenda" para el militar que realizó disparos al aire sin recibir permiso.

"Hacemos todo lo posible para no dañar a los que no están implicados. Lamento los daños a los civiles y la muerte del niño. Seguiremos aprendiendo y merjorando para actuar con precisión contra el terrorismo", ha sostenido el comandante del Mando Central, Yehuda Fox, según el comunicado publicado por el Ejército israelí.

"FALTA DE SERIEDAD"

Por su parte, el Ministerio de Exteriores palestino ha resaltado que el anuncio del Ejército israelí "es la prueba concluyente de la falta de seriedad de las investigaciones israelíes", después de que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) confirmaran el martes que no imputará a los militares implicados en la muerte de un anciano palestino-estadounidense que fue abandonado después de ser detenido durante una operación llevada a cabo en enero de 2022 en Cisjordania.

De esta forma, ha acusado a Israel de "burlarse de la posición de los estados y la opinión pública global" y ha añadido que "este comportamiento racista y colonial es un crimen por sí mismo y la prueba concluyente de la participación de las instituciones políticas y militares del Estado ocupante en estos crímenes, especialmente por las instrucciones que facilitan que se abra fuego contra ciudadanos palestinos y se los trate como objetivos".

"El Ministerio expresa una vez más su incredulidad ante el silencio del Tribunal Penal Internacional (TPI) y el lento ritmo de sus trabajos y sus investigaciones en torno a los crímenes de la ocupación", ha manifestado a través de un comunicado publicado en su página web, en el que ha reclamado que "se emitan órdenes de arresto y citaciones contra los criminales y los asesinos".

Las autoridades palestinas ya habían criticado con dureza la decisión de Israel de no imputar a los soldados implicados en la muerte de Omar Asad, de 80 años. La Fiscalía Militar apuntó que los militares harán frente únicamente a medidas disciplinarias al considerar que no hay vinculación aparente entre la conducta de los militares y el fallecimiento del hombre, detenido en un puesto de control en Cisjordania y posteriormente esposado y amordazado junto a un grupo de palestinos que fueron posteriormente abandonados en la zona.

Las investigaciones han confirmado que Asad permaneció esposado, amordazado y con los ojos blindados durante más de una hora, así como que la mordaza le podría haber dificultado respirar y pedir ayuda, según fuentes cercanas a las pesquisas, que han indicado que el estado del hombre habría empeorado por el frío, lo que le llevó a una sufrir una hipotermia y un infarto.

El Ministerio de Exteriores palestino solicitó el martes a la Administración de Joe Biden que "investigue este crimen" e incidió en que "el Estado de Palestina está totalmente preparado para cooperar con cualquier investigación estadounidense para descubrir a los asesinos y hacer que rindan cuentas, incluidos criminales de guerra israelíes y los que están detrás de ellos".

Las autoridades estadounidenses reclamaron en enero de 2022 una "investigación exhaustiva y una rendición de cuentas total en este caso", al tiempo que recalcó que lo sucedido era un "preocupante incidente" que Washington estaba abordando con el Gobierno de Israel.