Publicado 12/12/2019 16:37

El jefe de Carabineros admite la "responsabilidad" del cuerpo de seguridad en los abusos durante las protestas en Chile

Carabineros anuncia una "modernización" que incluirá el uso de "armas no letales"

MADRID, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -

El general director de Carabineros, Mario Rozas, ha reconocido este jueves la "responsabilidad" del cuerpo de seguridad en las violaciones de los Derechos Humanos cometidas en la represión de las protestas en Chile contra el Gobierno de Sebastián Piñera.

En "algunas de las investigaciones que se están realizando, se ha llegado a la certeza administrativa de que hay responsabilidad de los carabineros involucrados", ha dicho Rozas en una rueda de prensa, según informa el diario chileno 'La Tercera'.

Rozas ha precisado que, una vez esté completo sumario, "se hará la formulación de cargos" y, en su caso, "se van a aplicar sanciones disciplinarias" que van desde la expulsión de Carabineros hasta "anotaciones negativas", que afectan a su carrera en Carabineros.

"En forma paralela, indudablemente, esto continúa por la arista penal a través del Ministerio Público, donde hemos prestado toda la colaboración para que estos casos se puedan esclarecer", ha subrayado.

Rozas ha admitido que algunos uniformados han cometido hechos "repudiables" y por eso ha indicado que su cargo está disposición de sus superiores, "si ellos lo estiman conveniente".

"MODERNIZACIÓN" DE CARABINEROS

Por otro lado, ha anunciado que la institución armada ha iniciado un proceso de "modernización". "Va a sufrir una optimización que va a afectar a la estructura, el funcionamiento y la incorporación de nuevas tecnologías", ha explicado.

En el caso de la capital, ha revelado que "se va a suprimir la zona de Santiago de Control del Orden Público y se van a crear dos prefecturas que van a pasar a denominarse prefecturas de Control del Orden Público, una en la zona oeste y otra en la este".

Otro gran cambio será la incorporación de "nuevas tecnologías" para incluir "armas no letales, vehículos más livianos mucho más versátiles y medios audiovisuales", "siguiendo las experiencias de otros países, incluidas la Policía Nacional y la Guardia Civil españolas.

También se prevé una "readecuación de los protocolos de actuación" para la cual se va a tener en cuenta a la sociedad civil. "Vamos a aceptar la cooperación para que instituciones como el Instituto Nacional de Derechos Humanos o la Defensoría de la Niñez (...) nos puedan ayudar a actualizar nuestras tácticas y técnicas", ha señalado.

CRISIS SOCIAL

Las protestas en Chile estallaron el pasado 17 de octubre por la cuarta subida del precio del metro en pocos meses pero escalaron rápidamente hasta denunciar la desigualdad social y exigir un cambio constitucional.

Más de 20 personas han muerto por la represión de las manifestaciones contra el Gobierno, entre ellas cinco de las que el Instituto Nacional de Derechos Humanos ha acusado a las fuerzas de seguridad, entre ellas Carabineros.

Piñera, que reaccionó inicialmente declarando el estado de emergencia, pidió perdón por no escuchar a los chilenos, anunció una "agenda social" para colmar sus demandas y remodeló el Gobierno para llevarla a cabo.

Además, el presidente chileno ha accedido 'in extremis' a un proceso constituyente que se decidirá en un plebiscito el próximo mes de abril. Pese a ello, las protestas han continuado.