Actualizado 27/06/2018 15:50

Jefes de Policía de EEUU piden a Trump que busque una alternativa a la detención de familias migrantes

Familia en Guatemala
Europa Press

   WASHINGTON, 27 Jun. (Reuters/EP) -

   Jefes de Policía de Estados Unidos han enviado este miércoles una carta a la Casa Blanca en la que piden al presidente, Donald Trump, que busque una alternativa a la detención de familias migrantes por los riesgos que supone para los niños.

   La carta está firmada por más de 45 jefes de Policía, tanto demócratas como republicanos, retirados y en activo, entre los que destacan Peter Newsham (Washington), John Mina (Orlando) y Cel Rivera (Ohio).

   Los uniformados creen que la cárcel no es la solución para las familias migrantes porque no representan ninguna amenaza para las comunidades de acogida.

   Además, han advertido sobre los peligros a los que se enfrentan los menores, que van desde el impacto psicológico hasta la radicalización. "Lo último que necesitamos es marginar a gente joven", ha dicho el jefe de Policía de Houston, Art Acevedo, que emigró desde Cuba siendo niño.

   "Podemos conseguir el objetivo de seguridad y de control a una fracción del coste (actual) evitando el impacto negativo sobre los niños", ha afirmado Acevedo. Como alternativa, han propuesto que los cabeza de familia estén localizados por GPS, con brazalete electrónico o mediante llamadas de teléfono periódicas.

   Los agentes también han mencionado el coste económico de mantener a familias enteras recluidas durante largos periodos. Según sus cálculos, mantener a una persona encarcelada en un centro especializado para familias cuesta unos 300 dólares diarios.

   Los firmantes han asegurado que estas alternativas han resultado exitosas en un 99 por ciento de los casos en los que se han usado. "Los gobiernos locales las han estado usando durante mucho tiempo", ha subrayado la sheriff de Fresno, Margaret Mims, que dirige una cárcel local.

TOLERANCIA CERO

   Trump ha puesto en marcha una política migratoria de Tolerancia Cero por la cual los inmigrantes que llegan a Estados Unidos de forma ilegal son detenidos en la frontera con México.

   En un principio, los niños eran separados de sus padres migrantes, pero Trump ordenó cesar esta práctica y reunificar a las familias afectadas en respuesta a las críticas de la comunidad internacional y de sus propios colaboradores.

   Pese a esta concesión, el magnate neoyorquino ha aclarado que mantendrá su política de mano dura contra la inmigración ilegal. Así, ha avanzado que pedirá más dinero al Congreso para construir el muro fronterizo.