Actualizado 08/05/2015 20:22

Juan Manuel Santos: "La paz de Colombia será la paz de México"

Colombia's President Juan Manuel Santos gives a speech during a Plenary Session
Foto: EDGARD GARRIDO / REUTERS

MÉXICO DF, 8 May. (Notimex/Notimérica) -

   El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ha iniciado una visita oficial a México junto a su mujer María Clemencia Rodríguez, donde destacó la importancia de México en los procesos de negociaciones de paz en la región latinoameicana, así como la inmejorable relación entre ambas naciones en este momento.

   "Porque la paz de Colombia será la paz de México, porque así se siente cuando los pueblos se quieren como hermanos", dijo Santos en la sede del Senado ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión en el marco de la Visita de Estado que realiza a México.

   Así mismo, el mandatario mexicano, Enrique Peña Nieto, dio la bienvenida a su homólogo colombiano durante una ceremonia, donde sostuvo que el comercio bilateral entre ambas naciones ha crecido un 14 por ciento al año y que hoy es 12 veces más grande que hace apenas dos décadas.

SANTOS ORDENA INTENSIFICAR LAS OFENSIVAS CONTRA EL ELN

   Al mismo tiempo, desde Ciudad de México, el presidente colombiano repudió los hechos ocurridos al norte de Santander, donde un soldado perdió sus extremidades inferiores y que posteriormente fueron exhibidas en un colegio de la zona como trofeo por parte del Ejércio de Liberación Nacional (ELN).

   "Poner minas ya es un acto de salvajismo, viola todas las reglas del Derecho Internacional Humanitario, pero ya ir a mostrar una pierna como trofeo al lado de un colegio, eso ya es un acto de barbarie, un acto de barbarie que raya con lo demencial, que debe ser condenado no solamente por los colombianos sino por el mundo entero", dijo Santos, según recogió Colprensa.

   En ese sentido, el jefe de Estado anunció que ordenó al ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, incrementar la ofensiva contra esa guerrilla, pues calificó como "demencial" la acción de esa guerrilla de exhibir como un trofeo la pierna del cabo primero del Ejército, Eduardo Alfonso Ávila Romero, víctima de la mina antipersonal.