Actualizado 29/07/2012 21:16

Kenia/Venezuela.- Dos altos cargos venezolanos llegan a Kenia a raíz de la muerte de la jefa de su misión diplomática


MADRID, 29 Jul. (EUROPA PRESS) -

Venezuela ha enviado a dos altos funcionarios del Gobierno a Nairobi para que presionen en la realización de una investigación exhaustiva y en la detención de los responsables del asesinato de la jefa de su misión diplomática, Olga Arelis Fonseca, según informan los medios de comunicación kenianos.

La Policía keniana ha interrogado a su conductor, Kevin Odhiambo, quien ha señalado que en la Embajada había problemas de liderazgo, Fonseca asumió la jefatura de la misión el pasado 15 de julio. Además, otras ocho personas han sido arrestadas por su presunta implicación, entre ellos el primer secretario de la Embajada, que debido a su inmunidad diplomática ha sido puesto en libertad.

Fonseca, de 57 años, apareció el viernes estrangulada en la cama de su residencia de Nairobi. El jueves se realizara una fiesta en la vivienda, momento en el que, según Odhiambo, algunos miembros del personal fotografiaron la zona residencial, según recoge este domingo la cadena radiofónica de Kenia Capital News.

Al parecer los funcionarios venezolanos han visitado el lugar donde fue encontrado el cuerpo de Fonseca antes de dirigirse a la funeraria en la que están sus restos mortales.

El jefe de Policía de Nairobi, Anthony Kibuchi, ha declarado que la investigación progresa bien y que en función del resultado espera acusar a alguno de los sospechosos el martes. "Están escribiendo más declaraciones antes de comparecer ante el tribunal. Estamos haciendo un buen progreso en este caso de asesinato", ha indicado.

En la misma línea el equipo encabezado por el jefe del Departamento de Investigación Criminal (CID, por sus siglas en inglés), Nicolas Kamwende, continúa grabando las declaraciones de los sospechosos y esperan poder presentar cargos de asesinato a raíz de estas pesquisas. "Definitivamente vamos a tener algunas personas ante los tribunales. Se trata de una cuestión de tiempo", ha declarado Kamwende.

La Policía ha señalado que la diplomática aún no tenía escolta policial ni su residencia estaba custodiada. A su llegada para hacerse cargo de la misión venezolana estuvo viviendo en un hotel y se traslado a la vivienda oficial dos días antes de su muerte.