BRUSELAS, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Unión Europea ha señalado este lunes que el ataque "terrorista" contra fuerzas kosovares en la localidad de Banjska (norte) por parte de personas armadas, a las que Pristina ha vinculado con Serbia, es un "doloroso" ejemplo de la necesidad de rebajar las tensiones.
"Las ultimas evoluciones subrayan la necesidad de tomar pasos urgentes para desescalar la tensión", ha afirmado el portavoz de Exteriores de la UE Peter Stano, en rueda de prensa desde Bruselas, donde ha reiterado la firme condena de la UE al "cobarde ataque terrorista", que se saldó con un agente muerto.
Tres de los atacantes también han resultado muertos en combates con las fuerzas de seguridad kosovares, que rodearon a cerca de 30 personas armadas que se atrincheraron en un monasterio ortodoxo serbio.
"Esto subraya lo que la UE viene defendiendo: tenemos que encontrar una salida a la crisis constante y volver al diálogo para resolver los problemas", ha señalado el portavoz del Alto Representante, Josep Borrell, quien estuvo en contacto este domingo con el primer ministro kosovar, Albin Kurti, y el presidente serbio, Aleksandar Vucic, en medio de las acusaciones cruzadas tras el altercado.
En este sentido, Stano ha señalado que la necesidad de desescalar la tensión en el norte de Kosovo fue subrayada "de forma muy dolorosa ayer", "pero también hace días, semanas y meses antes". Respecto a si la UE tomará medidas contra Belgrado por el último altercado protagonizado por serbokosovares, ha evitado confirmar este extremo y ha pedido esperar a que una investigación aclare los responsables detrás del ataque en Banjska.
Del mismo modo, ha insistido en que las acciones económicas y diplomáticas de la UE contra Kosovo por la falta de medidas para rebajar la tensión son "temporales" y pueden "aumentar o rebajarse" según la situación en el terreno, apuntando que podrán extenderse a Serbia si los Veintisiete así lo deciden.
La UE lleva meses reclamando a Pristina medidas para rebajar la tensión en el norte de Kosovo tras el último pico alcanzado con las elecciones boicoteadas por la mayoría serbokosovar que designaron a alcaldes de origen albanés. La diplomacia europea pide repetir las elecciones en el norte de Kosovo y poner fin al ciclo de tensiones que han marcado los últimos meses.
"No podemos esperar a la siguiente crisis. Tiene que suceder inmediatamente, en línea con la petición de la UE", insistió Borrell en un comunicado hace diez días tras el enésimo encuentro entre Kurti y Vucic en Bruselas que se saldó sin avances para encauzar la aplicación de los acuerdos que lleven a la normalización de las relaciones.