Publicado 02/11/2020 15:34

Líbano.- Aoun dice que las conversaciones con Hariri sobre el nuevo Gobierno en Líbano no cuentan con "terceras partes"

El presidente de Líbano, Michel Aoun
El presidente de Líbano, Michel Aoun - -/Dalati & Nohra/dpa - Archivo

MADRID, 2 Nov. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Líbano, Michel Aoun, ha asegurado este lunes que las conversaciones sobre la formación del nuevo Gobierno siguen en marcha entre él y el primer ministro designado, Saad Hariri, "sin la implicación de terceras partes".

La Presidencia ha señalado en un breve comunicado en su cuenta en la red social Twitter que los contactos se están llevando a cabo siguiendo "estrictamente" entre ambos, "en línea con la Constitución". Así, ha dicho que "están progresando para servir los más elevados intereses nacionales".

El mensaje ha sido publicado tras el aplazamiento de la reunión entre ambos prevista para el domingo, ante los supuestos obstáculos en torno al número de ministerios, la rotación en los mismos y el reparto de las llamadas 'carteras soberanas' --Exteriores, Interior, Defensa y Finanzas--.

Hariri, nombrado para el cargo cerca de un año después de dimitir en medio de unas masivas movilizaciones contra su Gobierno, inició el 23 de octubre sus contactos con los bloques parlamentarios. En este sentido, prometió que formará "un Gobierno de especialistas que no pertenezcan a ningún partido" y "aplicará los artículos de la iniciativa francesa".

De esta forma, hizo referencia a la propuesta presentada por el presidente de Francia, Emmanuel Macron, tras las explosiones del 4 de agosto en el puerto de Beirut, que dejaron más de 200 muertos y profundizaron las graves crisis a nivel económico, político, humanitario y de seguridad que atraviesa el país.

Macron ha realizado dos viajes oficiales al país y ha lanzado diversos mensajes para presionar a los políticos libaneses a poner en marcha esta iniciativa, que contempla un importante paquete de reformas a nivel político, económico y social.

Las explosiones tuvieron lugar en un momento en el que Líbano atraviesa una grave crisis económica --la peor desde la guerra civil (1975-1990)--. El próximo Gobierno tendrá que impulsar el proceso de reformas reclamadas por la población y la comunidad internacional, que ha condicionado la entrega de apoyo financiero a la puesta en marcha de un paquete de medidas a nivel económico, político y social.