Publicado 28/12/2021 10:17

Líbano.- Aoun pide un diálogo nacional "urgente" y critica veladamente a Hezbolá por la parálisis del Gobierno de Líbano

Archivo - El presidente de Líbano, Michel Aoun
Archivo - El presidente de Líbano, Michel Aoun - -/Dalati & Nohra/dpa - Archivo

Pide abordar la "estrategia de defensa" y destaca que "la responsabilidad primaria recae sobre el Estado"

MADRID, 28 Dic. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Líbano, Michel Aoun, hizo a última hora del lunes un llamamiento a un diálogo nacional "urgente" y criticó veladamente por la parálisis del Gobierno al partido-milicia chií Hezbolá, en una nueva muestra de tensión entre formaciones aliadas ante la crisis política y económica que sacude el país.

Aoun recalcó en un discurso a la nación que es necesario abordar la "estrategia de defensa" del país, en referencia a las armas que controla Hezbolá, y defendió que "sólo el Estado" define esta estrategia y la aplica, según ha recogido el diario libanés 'L'Orient le Jour'.

Así, el mandatario subrayó que "es necesario hablar abiertamente y de forma muy detallada" sobre la situación actual debido a que "los peligros aumentan y amenazan la unidad de la nación". "Por desgracia, los componentes del sistema actual se niegan a renunciar a sus privilegios y no tienen en cuenta la situación del pueblo", lamentó.

"Es cierto que la defensa de la patria necesita una cooperación entre el Ejército, el pueblo y la resistencia --en referencia a Hezbolá--, pero la responsabilidad primaria recae sobre el Estado. Sólo el Estado fija la estrategia de defensa y vigila su aplicación", manifestó.

"Sin embargo, antes de llegar ahí, sería necesario empezar por poner fin a un bloqueo deliberado, sistemático e injustificado que nos lleva al desmantelamiento de las instituciones y a la disolución del Estado", arguyó, en referencia al bloqueo a las reuniones del Gobierno por parte de Hezbolá por sus exigencias sobre el cese del juez Tarek Bitar, que investiga las explosiones de agosto de 2020 en el puerto de la capital, Beirut.

Las declaraciones de Aoun suponen un golpe a Hezbolá, con el que su partido, el Movimiento Patriótico Libre (FMP) firmó una alianza en 2006, y se enmarcan en unas tensiones que aumentaron tras la implicación del partido-milicia en la guerra en Siria y que se han agudizado en el marco de la actual crisis.

En este contexto, la alianza se ha visto debilitada durante las últimas semanas por las disputas en torno a la fecha de las próximas elecciones legislativas. El Parlamento aprobó el 27 de marzo como fecha, si bien Aoun se negó a ratificarla, desatando las críticas del presidente del órgano legislativo, Nabih Berri, quien es líder del también chií Movimiento AMAL y aliado del FMP.

Finalmente, el ministro del Interior, Basam Maulaui, aprobó el lunes un decreto fijando el 15 de mayo como jornada electoral, si bien el documento debe aún ser firmado por el primer ministro, Nayib Mikati, y por el propio Aoun, quien se ha mostrado favorable a que los comicios tengan lugar durante el mes de mayo.

Aoun tuvo durante su discurso críticas para Berri por el bloqueo del Gobiermo y recalcó que esta situación "provoca la parálisis de la Administración". "Los asalariados esperan sus sueldos, los hospitales esperan sus remuneraciones y los pacientes esperan sus cuidados", destacó.

"¿Quién es responsable de que no haya Presupuestos para el año pasado y que esté cerca de pasar lo mismo este año? ¿Quién obstruye la auditoría financiera?" ¿Es que el objetivo es procrastinar y encubrir los nombres de los propietarios de millones saqueados?", se preguntó.

Por ello, hizo hincapié en que "es necesario que el Gobierno se reúna hoy, mejor que mañana, para arreglar los problemas en el seno del Consejo de Ministros", al tiempo que pidió "modificar el modo de gobernanza" y finalizar las auditorías del Banco de Líbano y las instituciones públicas para abordar la profunda crisis económica.

"La solución requiere rendición de cuentas, lo que significa identificar a los responsables del colapso y proteger el dinero de la gente y devolverlo a sus depositarios. También requiere una transición a un Estado civil y un nuevo sistema fundamentado en una descentralización administrativa y financiera de amplio alcance", arguyó.

"Las próximas elecciones deben ser un referéndum sobre esto", ha explicado. "No quiero enfrentarme a nadie, individuos o grupos, y no quiere socavar la unidad de ninguna secta, pero hay que ser francos. Procrastinar es letal y no aceptaré ser testigo de la caída del Estado", remachó el presidente libanés, tal y como ha recogido el portal de noticias Naharnet.

Líbano se encuentra sumido en una grave crisis política y económica ahondada por la pandemia de coronavirus y las explosiones en el puerto de la capital, que dejaron más de 200 muertos y enormes daños materiales, lo que ha incrementado además la inestabilidad política y ha profundizado una crisis humanitaria que ha hecho saltar las alarmas internacionales.

El Banco Mundial ha señalado que la crisis es una de las peores en la historia moderna, en medio de las alzas de los productos básicos, los cortes de luz y el aumento del desempleo, que están provocando un aumento de la población en riesgo de caer por debajo del umbral de la pobreza.