MADRID, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Policía de Líbano ha protagonizado este viernes un enfrentamiento con grupos de manifestantes que se han concentrado frente a la Embajada de Francia en la capital, Beirut, para protestar contra el Gobierno galo por defender la exhibición de caricaturas del profeta Mahoma, cuya representación está prohibida en el islam, tras el asesinato en un ataque terrorista cerca de París de un profesor que mostró estos dibujos.
Los manifestantes se ha concentrado ante las barricadas colocadas por la Policía en los accesos a la Embajada francesa al grito de "Dios bendiga a nuestro profeta" sin acceder al fortificado recinto, la llamada "Residencia de los Pinos", situada en el barrio de los museos de la capital libanesa.
Airados, los concentrados han comenzado a arrojar botellas vacías y piedras a la Policía, que se ha visto obligada a intervenir con gases lacrimógenos, según informa el diario libanés 'Daily Star'.
Las protestas contra Francia se han repetido en otros países musulmanes, como Pakistán, donde 2.000 personas han salido a las calles de Islamabad para concentrarse ante la Embajada francesa antes de acaba dispersadas por la Policía. También han ocurrido enfrentamientos entre manifestantes y Policía en Jerusalén, donde tres personas han sido detenidas, y en la capital de Afganistán, Kabul.
El asesinato hace dos semanas del profesor Samuel Paty y el atentado de este jueves en Niza, ambos perpetrados por islamistas, han provocado en un choque entre Francia y el mundo musulmán, como muestran las recientes declaraciones formuladas este viernes por el ministro del Interior galo, Gérald Darmanin, quien ha asegurado este viernes que su país está "en guerra" contra "la ideología islamista", al tiempo que ha subrayado que ha quedado "particularmente señalada" por los "llamamientos al odio" procedentes de otros países.
"Nosotros estamos en guerra", ha asegurado el titular de Interior francés, en una entrevista con la cadena RTL un día después del atentado en el que un islamista mató con un cuchillo a tres personas en la basílica de Notre Dame de Niza. "Una guerra frente a un enemigo que es a la vez un enemigo interior y un enemigo exterior", ha explicado.