Publicado 24/01/2020 20:55

Libia.- Condenado a 19 años de cárcel un miliciano libio por el ataque al consulado de EEUU en Benghazi en 2012

MADRID, 24 Ene. (EUROPA PRESS) -

Un juez federal de Estados Unidos ha condenado a un miliciano libio a más de 19 años de cárcel por su papel en el ataque ejecutado en 2012 contra el consulado de Estados Unidos en la ciudad de Benghazi, que se saldó con la muerte de cuatro estadounidenses, incluido el embajador, Christopher Stevens.

El acusado, Mustafá al Imam, ha sido sentenciado a 19 años y medio de prisión por cargos de terrorismo, entre otros, según ha confirmado el Departamento de Justicia a través de un comunicado.

"No hemos descansado en nuestros esfuerzos para hacer justicia con aquellos implicados en los ataques terroristas contra nuestras instalaciones en Benghazi, que llevaron a la muerte de cuatro valientes estadounidenses, y nunca lo haremos", ha dicho el vice fiscal general para Seguridad Nacional, John Demers.

Al Imam se ha convertido así en el segundo condenado por el ataque. Ahmed Abú Jatalá, el sospechoso de coordinar el asalto, ejecutado el 11 de septiembre de 2012, fue sentenciado en junio de 2018 a 22 años de cárcel.

En la noche de los ataques, hombres armados irrumpieron en el complejo diplomático y lo incendiaron, matando a Stevens y a Sean Smith, un empleado del Departamento de Estado.

Horas después, los milicianos atacaron una base cercana de la CIA con proyectiles de mortero y armas ligeras, matando a los contratistas de seguridad Tyrone Woods y Glen Doherty.

Las autoridades estadounidenses apuntan a Ansar al Sharia como principal responsable de este ataque, aunque en un principio dijeron que era un asalto esporádico, pero sospechan que habría otros grupos aliados detrás del asalto a la oficina.

El ataque contra el consulado en Benghazi fue considerado como uno de los mayores fracasos en política exterior del Gobierno de Barack Obama, que ha sido muy criticado por la escasa seguridad de estas instalaciones y por la información suministrada sobre el suceso.

El blanco de todas las críticas fue la entonces secretaria de Estado, Hillary Clinton, y el caso del asalto supuso uno de los principales caballos de batalla de los republicanos durante su intento de ganar la Presidencia en las últimas elecciones, en las que se impuso Donald Trump.