BUENOS AIRES, 4 Abr. (Notimérica) -
El 4 de abril de 1963, hace 54 años, falleció el creador de la doctrina ético-filosófica llamada logosofía. Las ideas que lo sustentan fueron creadas por Carlos Bernardo González Pecotche, más conocido como "Raumsol".
Desde la perspectiva del autor argentino Raumsol, la enseñanza tradicional es una lacra para los estudiantes. Para ser un gran docente se deben conocer varios métodos pedagógicos y así cumplir, de la mejor manera, la compleja tarea de ser profesor.
La logosofía revela que actualmente se confunde la información con el conocimiento. Se induce al estudiante a memorizar grandes cantidades de ideas y conceptos que ni entienden ni han experimentado. Y que por tanto, solo se sabrán a la hora del examen pero que nunca retendrán a posteriori de forma congruente. Esta acumulación de información no sirve de nada excepto para que el estudiante excluya su capacidad de debatir, pensar y construir una opinión propia.
Como solución, la logosofía propone tres etapas para llegar al verdadero conocimiento: recibir la información y asimilarla, experimentar el conocimiento en el mundo material y, por último, el perfeccionamiento del conocimiento adquirido.
La forma de resolver las insuficiencias pedagógicas de la logosofía son buenas pero no suficientes para resolver el problema ya que no consideran la posibilidad del error que es parte inevitable del proceso de aprendizaje.
La logosofía rescata los vínculos, las experiencias personales y los valores de cada familia para poder llevar a cabo una experiencia cognitiva que va más allá de los libros. Esta pedagogía pretende y aspira a que cada ser humano se supere a sí mismo y que pueda deliberar libremente, sin trabas mentales sobre cualquier concepto o realidad.
Se centra en la configuración psicológica real del individuo con el mundo que le rodea, consciente en todo momento de su ser y de sus capacidades de cambio, siempre en beneficio del uno mismo y de los que le rodean.
El discurso de la logosofía niega que sea una religión y lo define como doctrina o filosofía pedagógica. Pero si se busca constantemente el autoconocimiento eterno y los límites intangibles fuera de la materia común, ¿por qué siguen rechazando el concepto y designación de religión?
Los centros de estudios logosóficos en la actualidad se han extendido hasta Venezuela, México, Estados Unidos, España e Israel además de continuar destacando en los diversos países donde estableció sus primeras fundaciones. Quedan algunos interrogantes por responder pero la logosofía desarrollada por el argentino Raumsol es, sin duda, una nueva forma de interpretación que todos deberíamos tener en cuenta.