Actualizado 15/04/2014 20:10

Maduro, un primer año de mandato marcado por los conflictos

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro
Foto: REUTERS

Su año de Gobierno ha estado marcado por la crisis económica y por los conflictos violentos que el país vive durante los últimos meses

   CARACAS, 15 Abr. (Notimérica/EP) -

   El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, cumple esta semana un año al frente del Gobierno, el cual ha estado marcado por la crisis económica, las acusaciones de sabotaje sobre la oposición, las tensiones políticas y las protestas en las calles de una parte de la sociedad venezolana, que sigue sin digerir la victoria electoral de la revolución bolivariana.

   Nicolás Maduro asumió el cargo prometiendo continuar con el legado de su antecesor, el fallecido Hugo Chávez, quien le designó como sucesor en 2012 antes de viajar a La Habana para enfrentarse a una enfermedad, que finalmente no pudo derrotar. "Hemos mantenido la independencia, la revolución y el camino del socialismo venezolano que inició Chávez", señaló hace un año cuando derrotó al principal líder de la oposición, Henrique Capriles, quien sigue sin reconocerle como presidente.

   El actual jefe del Estado venezolano forma junto a Evo Morales, José Mujica o el exdirigente brasileño Lula da Silva, parte de esa nueva generación de presidentes latinoamericanos que en los últimos años han trasladado las luchas sociales de los campos y las fábricas a los grandes despachos de la nación.

   Los primeros doce meses de Maduro al frente de Venezuela han estado marcados, según ha denunciado en varias ocasiones, por los ataques que la misma oligarquía dirigió contra Chávez años atrás, emprendiendo una guerra económica basada en el sabotaje, la guerra eléctrica, el acaparamiento de productos y más recientemente con las barricadas y 'guarimbas' construidas en las calles con motivo de las protestas, que desde hace varias semanas tienen al país en estado de alerta, tras registrarse más de cuarenta fallecidos.

   Cuestionado desde que asumió la Jefatura del Estado, el Poder Judicial  ha ido desechando las diversas peticiones de impugnación de las elecciones presentadas por la oposición, la cual volvió a ver como perdía de nuevo en las urnas cuando el pasado mes de diciembre el 'chavismo' se impuso en los comicios municipales poca algo menos de un millón de votos.

   Antes de asumir cargos de alta responsabilidad política, fue ministro de Asuntos Exteriores entre 2006 y 2013, trabajó en la década de los noventas como conductor del metro de Caracas, en donde llegó a dirigir un sindicato. Durante esos años conoció en la cárcel tras una visita a Hugo Chávez, preso tras el intento fallido de golpe de Estado de 1992, a quien posteriormente ayudaría en la creación de la fuerza política que se impondría en las elecciones de 1998, el Movimiento Quinta República (MVR).

CRISIS EN VENEZUELA

   La crisis política estalló el pasado 12 de febrero, cuando arrancaron las protestas antigubernamentales y la represión de las mismas por parte de las fuerzas de seguridad y de civiles armados, de dudosa procedencia, dejando al menos 41 muertos, 608 heridos y 192 detenidos.

   El líder opositor de Voluntad Popular, Leopoldo López, despojado de la posibilidad de ostentar cargos públicos desde 2008, fue señalado por el Gobierno como responsable de las actos vandálicos y violentos que se produjeron los días posteriores al inicio de las manifestaciones. Retenido en una prisión militar, finalmente la Fiscalía le acusó de daños a la propiedad, incendio y asociación para delinquir.

   La inestabilidad en el país no ha pasado desapercibida para los vecinos de la región, quienes en su gran mayoría han respaldado a Nicolás Maduro, haciendo suyas también las acusaciones que hablan de un intento de golpe de Estado contra el Gobierno de Venezuela. Ha sido el caso de la Unión de Naciones Sudamericanas (UNASUR), quienes no sólo apoyaron al mandatario venezolano, sino que además propusieron una meda de debate en la que reunir a todas las partes del conflicto.

   Así, el Gobierno ha instalado una mesa de diálogo en la que estuvieron presentes hasta once líderes de la oposición, entre ellos Henrique Capriles, durante su primera celebración la semana pasada. Está previsto que las conversaciones, a las que ha sido invitado un representante de El Vaticano para que ejerza como "testigo de buena fe" junto a los cancilleres de la UNASUR, se retomen en los próximos días.

LEY DE PRECIOS JUSTOS

   El año 2014 comenzó con la entrada en vigor de la Ley de Precios Justos, por la cual el Gobierno prohibía y sancionaba a todos aquellos productores y distribuidores obtuvieran márgenes de ganancias superiores al 30 por ciento, del mismo modo que se establecían pena de hasta diez años de cárcel para aquellos que acapararan con fines espurios productos de primera necesidad.

   La nueva norma vino motivada por el antiguo recelo que tiene el Gobierno acerca de la posibilidad de que los grandes productores de Venezuela, afines a las fuerzas opositores, acaparen los productos y saboteen los centros de distribución con el fin de que estalle una revuelta social. Meses antes de la entrada en vigor de esta ley, el Gobierno ordenó, por este mismo motivo, la ocupación de una cadena de tiendas de electrodomésticos, acusada de especular son los productos.

CONFLICTOS DIPLOMÁTICOS

   La relación de Venezuela con Estados Unidos no pasa por su mejor momento desde que Hugo Chávez accediera a la Presidencia del país. Los años de la administración George W. Bush (2001-2009) fueron especialmente intensos, con apelativos de todo tipo por parte del ya difunto presidente venezolano. La etapa de Barack Obama pareció calmar un poco los ánimos, al menos no se era testigo de episodios tan beligerantes como los vividos durante la pasada década, aunque las acusaciones de que su Gobierno está detrás de las protestas se han sucedido durante todas estas semanas.

   Sin embargo, primero el ofrecimiento de asilo político de Maduro al exagente de la CIA Edward Snowden, acusado de filtrar información secreta de Estados Unidos; y segundo las denuncias del dirigente 'chavista' de que el país norteamericano le negó el permiso aéreo, desencadenaron en un conflicto diplomático que se saldó con la expulsión de tres funcionarios estadounidenses de Venezuela y otros tres venezolanos de EEUU.

   Por otro lado, Venezuela decidió romper relaciones diplomáticas con Panamá, después que el representante del país centroamericano en la Organización de Estados Americanos (OEA) ofreciera a la diputada opositora María Corina Machado ocupar su asiento en el organismo regional.

   Esta situación no solo provocó la ruptura de las relaciones entre ambos países, sino que además significó la expulsión de la Asamblea Nacional de la opositora, quien fue despojada de su fuero político por "traición a la patria", ya que accedió a ejercer un puesto ajeno a las competencias nacionales que le están reservadas a una figura política de su condición en la Constitución del país.