Actualizado 22/09/2015 09:56

Maduro y Santos se comprometen a trabajar para solucionar los problemas en la frontera

QUITO, 22 Sep. (EUROPA PRESS) -

   Los presidentes de Venezuela, Nicolás Maduro, y de Colombia, Juan Manuel Santos, se han comprometido este lunes "a construir un acuerdo que solucione los problemas de la frontera común", tras una esperada reunión celebrada en la capital de Ecuador, Quito, en la que también han acordado el retorno inmediato de embajadores y la apertura gradual de la frontera.

   "(Ambos mandatarios) coincidieron en la importancia de continuar fortaleciendo el diálogo bilateral entre ambos países, para garantizar el cumplimiento de estos propósitos, en el marco del respeto al derecho internacional", añade un comunicado leído al término de la reunión.

   Los jefes de Estado de Colombia y Venezuela han reafirmado "los lazos históricos, la vecindad geográfica y un origen común", al tiempo que han reconocido "la importancia de ratificar el derecho de cada país a desarrollar su propio modelo político, jurídico, económico y social", así como a organizarse "en la forma que más le convenga, sin ingerencias externas".

   Maduro y Santos también se han comprometido a realizar una investigación de la situación de la frontera y a reunir este mismo miércoles 23 de septiembre en Caracas (Venezuela) a los equipos de ministros "para empezar a tratar los temas sensibles de la frontera".

   Asimismo, han acordado hacer "un llamado al espíritu de hermandad y la unidad, propiciando un clima de mutuo respeto y convivencia", además de seguir trabajando con el acompañamiento de Ecuador y Uruguay, después de un primer encuentro que ambos califican como "constructivo".

   El encuentro ha contado con la mediación de presidente ecuatoriano Rafael Correa, presidente 'pro tempore' de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y del presidente uruguayo, Tabaré Vásquez, presidente 'pro tempore' de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR).

DECLARACIONES DE SANTOS Y MADURO

   El presidente de Venezuela ha dicho que tras este primer encuentro "no existe cabida para el odio" y ha apostado por el diálogo entre ambas naciones para superar la crisis fronteriza.

   "Le digo a nuestro pueblo que no hay cabida para el odio, intolerancia ni para el revanchismo, la única cabida que hay es para el dialogo, para la hermandad y para la superación y de los problemas que tenemos y sólo con la cooperación de ambos gobiernos lo superaremos", ha dicho.

   En un mensaje desde el Palacio de Carondelet, Maduro ha añadido que gracias al diálogo iniciado este lunes se podrán ir atendiendo todos los problemas uno por uno "en beneficio de la región sudamericana".

   Por su parte, el presidente Santos ha confirmado que se ha llegado al acuerdo de restablecer las instancias para trabajar conjuntamente y así normalizar la frontera. De igual manera, ha asegurado que entiende la preocupación de Venezuela frente a las bandas criminales, contrabando y el narcotráfico.

   "Nos une la lucha contra las bandas criminales, contrabando y narcotráfico. Nos une también el propósito de llevar bienestar a los habitantes de las fronteras de ambos lados. Somos países hermanos. De parte de Colombia solo hay cariño por Venezuela", ha expresado Santos.

   Durante la rueda de prensa posterior al encuentro, el mandatario colombiano también ha recordado que cuando asumió la Presidencia en el año 2010 se reunió con el entonces presidente venezolano Hugo Chávez y acordó respetar las diferencias.

   "Sobre este respeto podemos trabajar en objetivos comunes que convengan a nuestros dos pueblos. Comenzamos a trabajar en muchos frentes que nos unían. Uno de ellos fue el de la paz", ha sentenciado Santos.

CRISIS FRONTERIZA

   La crisis bilateral estalló el 19 de agosto cuando militares venezolanos fueron atacados por supuestos paramilitares colombianos en la frontera común, llevando al Gobierno de Maduro a ordenar un cierre de la línea limítrofe que ha ido a más en estas semanas.

   Desde entonces, casi 2.000 colombianos han sido deportados y otros 15.000 que vivían de manera legal en Venezuela han decidido volver voluntariamente a su país debido al acoso que --según denuncian-- sufren ahora en la nación vecina.

   El Palacio de Miraflores ha explicado que se trata de una campaña contra la infiltración de organizaciones criminales colombianas en Venezuela y ha reclamado a su vecino mayor colaboración para luchar contra los delitos fronterizos.

   Las ministras de Exteriores de ambos países se han reunido varias veces desde el inicio de la crisis pero sin llegar a acuerdos sustanciales y la reunión entre Santos y Maduro solo ha sido posible con la mediación regional.