Publicado 27/01/2020 19:53

Malí.- La rama de Al Qaeda en Malí reclama la autoría del ataque contra un cuartel en la región de Ségou

MADRID, 27 Ene. (EUROPA PRESS) -

La coalición yihadista Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes, rama de Al Qaeda en Malí, ha reclamado este lunes el ataque ejecutado el domingo contra un cuartel en la región central de Ségou, según ha recogido SITE Intelligence Group, un organismo especializado en hacer seguimiento de los grupos terroristas.

El Ejército maliense ha elevado durante la jornada a 20 el número de gendarmes muertos en el ataque, al tiempo que ha indicado que otros cinco efectivos resultaron heridos.

En un breve comunicado publicado en su página web, las Fuerzas Armadas malienses han resaltado que 60 gendarmes fueron "rescatados" en el lugar, mientras que ha confirmado la muerte de cuatro de los atacantes.

El jefe de la Misión Multidimensional Integrada de Estabilización de las Naciones Unidas en Malí (MINUSMA), Mahamat Saleh Annadif, ha condenado "firmemente" este "ataque cobarde".

Durante la jornada del sábado, tres 'cascos azules' resultaron heridos, uno de ellos de gravedad, a causa de la explosión de una bomba al paso de su vehículo en los alrededores de la ciudad de Gao (norte).

El país ha venido registrando en los últimos meses un número creciente de ataques yihadistas obra tanto de la filial de Al Qaeda en la región como de la de Estado Islámico, lo cual ha hecho además aumentar la violencia intercomunitaria y provocado el desplazamiento de decenas de miles de personas.

Sin ir más lejos, el 23 de enero fallecieron otros once militares en tres ataques perpetrados también en el centro del país.

Según denunció el 8 de enero el representante especial de la ONU para el Sahel, Mohamed Ibn Chambas, en los últimos meses la región --y principalmente Burkina Faso, Malí y Níger-- ha experimentado "un devastador aumento en los ataques terroristas contra objetivos civiles y militares".

En estos tres países, según Ibn Chambas, hubo en 2019 más de 4.000 muertos, una cifra que quintuplica los 770 que dejaron las acciones de los grupos terroristas en 2016. El responsable de la ONU llamó además la atención sobre el hecho de que "el foco geográfico" se está trasladando hacia el este, "amenazando cada vez más a los países costeros de África Occidental".