Publicado 19/02/2022 08:44

Malí.- La salida de Malí traslada a Níger y los países del golfo de Guinea la lucha antiterrorista en el Sahel

Emmanuel Macron  recibe en París al presidente de Níger, Mohamed Bazoum
Emmanuel Macron recibe en París al presidente de Níger, Mohamed Bazoum - ALEXIS SCIARD / ZUMA PRESS / CONTACTOPHOTO

Níger, por su estabilidad y posición, y también Costa de Marfil serán claves en los nuevos planes de Francia

MADRID, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -

La decisión de Francia de retirar sus efectivos de Malí y que ha arrastrado a otros países europeos a hacer también lo propio tendrá como consecuencia principal el traslado del epicentro de la lucha contra el yihadismo en el Sahel desde este país, en el que se originó el problema, hacia otros de la región, en particular Níger y en menor medida los del golfo de Guinea.

En el comunicado en el que este jueves se anunció la salida de las tropas francesas de 'Barkhane' así como de la fuerza 'Takuba' que integran una quincena de países europeos y Canadá, los firmantes expresan su intención de "proseguir su acción conjunta contra el terrorismo en la región del Sahel, principalmente en Níger y en el golfo de Guinea".

En este sentido, señalan que para "contener la potencial extensión geográfica de las acciones de los grupos terroristas hacia el sur y el oeste de la región", están dispuestos a ampliar su apoyo "a los países vecinos del golfo de Guinea y África Occidental sobre la base de sus demandas".

No obstante, el presidente francés, Emmanuel Macron, fue un poco más explícito en cuanto a los planes de futuro en la rueda de prensa ofrecida para explicar la decisión este jueves. "Con el acuerdo de las autoridades nigerinas, los elementos europeos serán reposicionados junto a las Fuerzas Armadas nigerinas en la región fronteriza de Malí", indicó.

Esta zona, que también hace frontera con Burkina Faso, se ha convertido en el principal foco de la actividad yihadista en la región, ya que en ella operan tanto la filial de Al Qaeda, el Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes (JNIM), como Estado Islámico en el Gran Sáhara (ISGS).

¿POR QUÉ NÍGER?

La elección de Níger, donde Francia cuenta actualmente con la mayor base aérea de 'Barkhane' y donde está además el puesto de mando conjunto con el G5 Sahel (Burkina Faso, Malí, Mauritania, Níger y Chad), viene motivada también por el hecho de que es el más estable ya que Burkina Faso, aunque es el más castigado actualmente por la violencia, fue escenario de un golpe de Estado militar el pasado 24 de enero.

"Burkina Faso y Níger están los dos en primera línea pero Níger hasta ahora se ha visto menos desbordado por el peligro terrorista y por tanto es considerado por París como un aliado más seguro", resume el experto nigerino Idrissa Abdourahmane, en declaraciones a France24.

En la decisión francesa también pesa el hecho de que Níger cuenta con un presidente elegido democráticamente, en contraste con sus vecinos. Mohamed Bazoum protagonizó el pasado mes de abril el primer traspaso democrático de poder en el país tras suceder a Mahamadou Issoufou, quien durante su mandato convirtió Níger en un aliado clave en materia de seguridad, no solo para Francia sino también para Estados Unidos.

Bazoum ya ha confirmado que habrá nuevas bases en el país cerca de la frontera de Malí, zona cuya seguridad ha reconocido que es prioritaria, y ha precisado que en ellas se instalarán principalmente las fuerzas de Takuba, algo que considera ventajoso ya que "son fuerzas especiales con capacidades para responder a la amenaza planteada por los terroristas".

Pero al igual que ya ocurriera en Malí primero y luego en Burkina Faso, el sentimiento antifrancés también ha hecho acto de presencia en Níger. El pasado 27 de noviembre, manifestantes contrarios a la presencia de 'Barkhane' bloquearon un convoy militar francés en Tera (oeste), en un suceso que se saldó con tres muertos en los altercados.

Bazoum pidió a Francia una investigación de los hechos, sin que por ahora se conozca si esta se ha producido o su resultado. El mismo convoy, que partió de Costa de Marfil y tenía como destino final Gao, en Malí, también fue bloqueado por manifestantes en Kaya, en el centro de Burkina Faso.

POSICIÓN DELICADA DE BAZOUM

Así pues, la posición del presidente nigerino "es muy delicada en el contexto actual, ya que los yihadistas podrían decidir hacerle pagar su compromiso con París", advierte a France24 Jean-Vincent Brisset, experto de IRIS.

También previene de que "un recrudecimiento de los ataques podría contribuir a aumentar el sentimiento antifrancés y por tanto potencialmente el riesgo de un golpe de Estado". Níger ya ha sufrido cuatro golpes militares desde su independencia en 1958.

Más al este, Chad, cuenta también con un puesto de mando de 'Barkhane' y desde una base aérea en Yamena se han venido realizando principalmente labores logísticas. El país es un aliado clave en la lucha contra el terrorismo en la región, pero en abril pasado registró un controvertido traspaso de poder después de que el Ejército respaldara que Mahamat Idriss Déby sucediera a su padre, Idriss Déby, tras la muerte de este en combate con un grupo rebelde.

Francia ha respaldado en todo momento la designación del hijo del histórico presidente, pese a que en el país la oposición denunció que era contraria a la Constitución. En este sentido, Mahamat Idriss Déby ya ha dicho que se puede contar con Chad e incluso ha adelantado que prevé "aumentar su compromiso militar en el seno de MINUSMA".

MAYOR PAPEL DE COSTA DE MARFIL

El otro país que también se espera que tenga un papel clave en esta redistribución de fuerzas es Costa de Marfil, en cuya capital, Abiyán, Francia cuenta con una base militar con 900 efectivos en la actualidad. El presidente del país, Alassane Ouattara, ya ha mostrado su disposición a dar cabida a más efectivos.

"Si nuestra seguridad exige que hagamos un llamamiento a aliados, a países amigos, lo haremos", aseguró en una entrevista a RFI y France24 la víspera de que se hiciera el anuncio oficial, aclarando que es algo que ya se está discutiendo.

"La salida de 'Barkhane' y Takuba crea un vacío. Nos veremos obligados a aumentar nuestras fuerzas de defensa, a aumentar la protección de nuestras fronteras, a comprar armas, a tener una mayor profesionalización", reconoció el mandatario marfileño.

Ouattara subraya que la lucha contra el terrorismo en el Sahel y la seguridad es "también obligación" de los países de la región. "Los ejércitos nacionales tienen que arreglar los problemas en nuestro territorio nacional", afirma. "Esa es nuestra filosofía y haremos que así sea, tomando todas las medidas posibles" y gastando lo que haya que gastar, asegura.