MADRID, 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
Expertos forenses han identificado los restos de 88 militares argentinos enterrados en tumbas anónimas en un cementerio de las Malvinas, después de que hace un año los gobiernos de Argentina y Reino Unido acordasen hacer todo lo posible para poner nombre a los soldados caídos durante la guerra de 1982.
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) ha informado en un comunicado de que ha entregado a las delegaciones de los dos países los informes resultantes del trabajo realizado para identificar los restos enterrados en el cementerio de Darwin.
"Nos alegra saber que será posible devolver la identidad a muchos de los soldados no identificados y con ello brindar respuestas a una gran parte de las familias que esperan hace más de treinta años", ha explicado el director de Actividades Operacionales del CICR, Dominik Stillhart, que ha agradecido el compromiso de las partes.
El cotejo de las muestras se ha llevado a cabo en el laboratorio forense del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) en la ciudad de Córdoba, mientas que sendos laboratorios en Reino Unido y España se encargaron del control y el aseguramiento de la calidad del análisis de ADN.
El CICR ha considerado que la identificación de los 88 soldados representa "una tasa de éxito alta". Ahora las autoridades argentinas informarán de los resultados de manera bilateral y confidencial a las familias que han solicitado la identificación de sus seres queridos.
Los restos exhumados estaban enterrados en tumbas marcadas con la leyenda: "Soldado argentino solo conocido por Dios". Una vez extraídas las muestras, los cuerpos fueron colocados en un nuevo féretro y sepultados en su tumba original el mismo día de la exhumación.
La guerra entre Reino Unido y Argentina por el control de las Malvinas, que se prolongó durante dos meses, se saldó en 1982 con la muerte de 255 efectivos británicos y unos 650 argentinas. Un cuarto de siglo después, el país sudamericano sigue reclamando la soberanía del archipiélago, aunque el actual presidente, Mauricio Macri, ha relajado el tono en comparación con su predecesora, Cristina Fernández.