Actualizado 05/04/2015 19:44

Marco Rubio quiere convertirse en el primer presidente latino de Estados Unidos

Rubio and Graham cross paths as they arrive for a vote on whether to overturn a
Foto: JONATHAN ERNST / REUTERS

MIAMI, 5 Abr. (Notimex/Notimérica) -

   Marco Rubio, hijo de inmigrantes cubanos, soñaba desde niño en convertirse en presidente de Cuba. Hoy en día, su ambición no ha cambiado mucho, pero ahora quiere convertirse en el primer mandatario latino de Estados Unidos.

   Rubio, de 43 años de edad, es senador por el Partido Republicano de Florida. Su nombre es uno de los que más ha sonado en los últimos meses entre los posibles aspirantes conservadores, y su posible candidatura a las primarias republicanas para las presidenciales de 2016 ha generado una gran expectativa.

   El senador de origen cubano posiblemente anuncie su campaña el próximo 13 de abril en Miami, pues, según fuentes, el legislador reservó la Freedom Tower en el centro de Miami para un evento que no fue especificado.

   "Anunciaré lo que voy a hacer en términos de presentarme para presidente o para el Senado", dijo Rubio en inglés esta semana a la cadena 'Fox'.

   "Yo no creo que haya ningún impedimento para que un hispano se haga presidente de Estados Unidos (...) esa oportunidad se presenta si uno hace un buen trabajo", declaró recientemente en español a la cadena 'Univisión'.

   Con una sonrisa alagadora y una gran oratoria, Rubio tiene una amplia facilidad bilingüe y una historia de superación digna de atrapar a cualquiera.

   "Soy hijo de inmigrantes exiliados de un país en problemas. Y yo soy prueba de que sus vidas importaron, su existencia tenía un sentido", escribió en su autobiografía 'Un hijo Americano' publicada en 2012.

   Rubio creció en Las Vegas bajo la tutela de unos padres trabajadores. Su padre ejercía como camarero en el Town Hotel Sams y su madre como ama de llaves en el Imperial Palace Hotel.

   Para 1985, la familia su mudó a Miami y en 1993, Rubio había logrado una licenciatura en Ciencias de la Universidad de Florida. Después, en 1996 obtuvo su doctorado de la Universidad de Miami.

   Su carrera parlamentaria comenzó en 2000-2008 cuando fue electo miembro de la Cámara de Representantes y su gran salto político ocurrió en 2010, cuando ganó las elecciones por el escaño en el Senado y comenzó a ejercer en 2011.

   En agosto de 2012 se dio a conocer ampliamente y brilló en la Convención Nacional Republicana en Tampa, Florida, con un discurso en el que evocó sus raíces cubanas para presentar al entonces candidato republicano a la presidencia Mitt Romney.

   Pero su imagen se desinfló en 2013 entre los más conservadores, al impulsar el proyecto de reforma migratoria, que habría conducido a la regularización de millones de indocumentados.

   El senador intenta desde entonces remontar la cuesta con esfuerzos paralelos para demostrar que puede encarnar la renovación ideológica de los conservadores.

   Entre los latinos también aumentaron las críticas debido al cambio de posición acerca de la política de inmigración, pasando a criticar la reforma y a aceptar la reforma para estudiantes indocumentados conocidos como "dreamers".

   Este joven senador rompe con el cliché del conservador tradicional: va con su esposa Jeanette y sus cuatro hijos a misa, pero escucha desde la adolescencia al rapero Grandmaster Flash.

   En el tema de política exterior, cree que crisis como las de Siria, Irak, Ucrania e Irán fuerzan a Estados Unidos a implicarse más en los asuntos mundiales.