MADRID, 6 Ago. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de Mauritania, Ismail Uld Bede Uld Cheij Sidaya, ha anunciado este jueves la dimisión por sorpresa de su Gobierno, que ha sido aceptada por el presidente, Mohamed Uld Cheij Mohamed Ahmed, sin que hayan trascendido los motivos de la decisión.
Cheij Sidaya ha presentado durante la jornada su renuncia y ha expresado su agradecimiento al mandatario, conocido como Uld Ghazuani, por "la confianza que le ha dado durante este periodo", según ha informado la agencia estatal mauritana de noticias, AMI.
Horas después, el presidente ha nombrado a Mohamed Uld Bilal, quien ya ha asumido el cargo tras una ceremonia de traspaso de poderes en la que su predecesor le ha deseado "éxito" en su nueva tarea al frente del país africano.
La dimisión del primer Ejecutivo formado en Mauritania tras la llegada de Uld Ghazuani al poder en agosto de 2019, ha llegado en el marco de las investigaciones por presunta corrupción contra el expresidente Mohamed Uld Abdelaziz y otros destacados funcionarios.
En las últimas semanas han surgido especulaciones en torno a la posibilidad de que algunos integrantes del Gobierno de Cheij Sidaya estén siendo investigados por la comisión parlamentaria creada a tal efecto.
El documento con las conclusiones de las investigaciones, que contiene más de 900 páginas, fue presentado la semana pasada al Parlamento del país, de cara a la posible apertura de procesos judiciales por parte de los tribunales mauritanos.
La comisión fue creada el pasado 30 de enero y tiene objetivo es investigar las concesiones de contratos públicos y potenciales malversaciones entre otros en el sector petrolero y, si bien no podrá emitir condenas, sí podrá recomendar la apertura de procedimientos judiciales.
Uld Abdelaziz, quien accedió a la Presidencia mauritana tras ganar las elecciones en 2009 --un año después de encabezar un golpe de Estado y presidir el Alto Consejo de Estado durante un periodo de transición, abandonó el cargo el año pasado.
Así, fue sustituido en el cargo por Uld Ghazuani, hasta entonces ministro de Defensa del país, quien concurrió a las urnas como 'delfín' de Uld Abdelaziz dado que él ya había llegado al límite de dos mandatos.
De esta forma, Mauritania concretó su primera experiencia de transición democrática desde la independencia del país, aliado de Occidente y bisagra entre el Magreb y el Sahel.
El país hace frente a una difícil situación económica, recrudecida por la falta de tierra cultivable y por una corrupción muy extendida. La situación tiene un impacto especialmente grave sobre niños y mujeres.