MADRID, 10 Ago. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Mauritania, Mohamed Uld Cheij Mohamed Ahmed, ha anunciado el nombramiento del nuevo Gobierno del país, tras la dimisión por sorpresa la semana pasada del Ejecutivo encabezado por Ismail Uld Bede Uld Cheij Sidaya.
Cheij Sidaya anunció la dimisión del Gobierno el 6 de agosto sin citar motivos para su decisión, tras lo que el mandatario, conocido como Uld Ghazuani, nombró como primer ministro a Mohamed Uld Bilal.
El secretario general de la Presidencia, Adama Bocar Soku, ha destacado que la dimisión del Ejecutivo está relacionada con las investigaciones por presunta corrupción contra el expresidente Mohamed Uld Abdelaziz y otros destacados funcionarios.
Así, ha resaltado que el informe definitivo, enviado recientemente al Parlamento, incluía los nombres de "algunos" de los ministros del Gobierno saliente y ha añadido que ahora "tendrán tiempo para demostrar su inocencia", tal y como ha recogido la agencia estatal mauritana de noticias, AMI.
Por otra parte, ha destacado que Uld Ghazuani ha hecho hincapié en la necesidad de "nueva sangre en el Ejecutivo" y de "acelerar el ritmo de la aplicación del programa" puesto en marcha por el presidente tras su llegada al poder, antes de hacer hincapié en la necesidad de que haya rendición de cuentas.
El documento con las conclusiones de las investigaciones, que contiene más de 900 páginas, fue presentado al Parlamento del país de cara a la posible apertura de procesos judiciales por parte de los tribunales mauritanos.
La comisión fue creada el pasado 30 de enero y tiene objetivo es investigar las concesiones de contratos públicos y potenciales malversaciones entre otros en el sector petrolero y, si bien no podrá emitir condenas, sí podrá recomendar la apertura de procedimientos judiciales.
Uld Abdelaziz, quien accedió a la Presidencia mauritana tras ganar las elecciones en 2009 --un año después de encabezar un golpe de Estado y presidir el Alto Consejo de Estado durante un periodo de transición, abandonó el cargo el año pasado.
Así, fue sustituido en el cargo por Uld Ghazuani, hasta entonces ministro de Defensa del país, quien concurrió a las urnas como 'delfín' de Uld Abdelaziz dado que él ya había llegado al límite de dos mandatos.
De esta forma, Mauritania concretó su primera experiencia de transición democrática desde la independencia del país, aliado de Occidente y bisagra entre el Magreb y el Sahel.
El país hace frente a una difícil situación económica, recrudecida por la falta de tierra cultivable y por una corrupción muy extendida. La situación tiene un impacto especialmente grave sobre niños y mujeres.