SAO PAULO, 12 Abr. (Reuters/EP) -
Casi dos tercios de los brasileños está a favor de un juicio político contra la presidenta, Dilma Rousseff, por el escándalo de corrupción de Petrobras, aunque la mayoría duda de que un proceso de estas características acabase en su dimisión.
Según un sondeo realizado por Datafolha, el 63 por ciento de los brasileños se muestra a favor de la realización de un juicio político por el supuesto esquema de sobornos en la estatal Petrobras, el gigante petrolero de Brasil.
Sin embargo, el 64 por ciento de los encuestados ha asegurado que no espera que este escándalo sea suficiente para forzar la dimisión de Rousseff, que comenzó en enero su segundo mandato.
Los partidos opositores del país han desestimado recurrir a un juicio político, aunque han apoyado las multitudinarias protestas contra la mandataria, cuya valoración ha caído de forma contundente en todas las encuestas.
Rousseff no está bajo la investigación de Petrobras y asegura que no sabía nada de los sobornos y el esquema de fijación de precios que supuestamente ha costado a la empresa miles de millones de dólares cuando ella estaba al frente del Consejo.
ACTITUD DE ROUSSEFF
Según esta última encuesta, un 57 por ciento de los brasileños dudan de la versión oficial y consideran que Rousseff estaba al corriente de lo que sucedía y permitió que ocurriera. Un 26 por ciento de los encuestados ha indicado que la mandataria conocía la situación pero consideran que no podía hacer nada.
Por otro lado, un 22 por ciento de los brasileños han considerado la corrupción como el principal problema del país, en segundo lugar pos detrás del sistema de salud pública. Estos datos contrastan con una encuesta similar realizada en julio, en la que un 14 por ciento de los brasileños mostraron su preocupación por la corrupción.