CIUDAD JUÁREZ, 7 Mar. (Reuters/EP) -
Marisol Valles, una estudiante de 20 años que en octubre causó sensación en el violento norte de México al asumir el cargo de jefe de policía de Práxides G. Guerrero, un peligroso pueblo cerca de Ciudad Juárez, fue despedida este lunes, después de que medios locales informaran de que había huido a Estados Unidos tras ser blanco de amenazas.
Valles había asumido el pasado octubre el puesto de jefe policial de Praxedis G. Guerrero, una localidad situada cerca de la frontera con Estados Unidos y uno de los peores focos de la violencia del narcotráfico que afecta a México.
La estudiante, madre de un niño pequeño, había pedido permiso para ausentarse de su puesto la semana pasada hasta este lunes con el fin de atender asuntos personales, pero el 'Diario de Juárez' informó de que había huido de México y pedido asilo en Estados Unidos para alejarse de las amenazas. Las autoridades negaron que hubiese solicitado refugio.
La alcaldía de Praxedis ha emitido un comunicado en el que alega que como la funcionaria no se presentó el día pactado para reintegrarse a sus funciones, "toma la decisión de removerla del cargo".
Valles, una mujer de baja estatura y con anteojos, sorprendió a muchos mexicanos al tomar el cargo en uno de los pueblos asolados por la violencia y donde muchos policías han muerto asesinados o han renunciado.
Cerca de 8.000 personas han muerto asesinadas en Ciudad Juárez y sus alrededores en los últimos tres años, cuando recrudeció la lucha entre el local cártel de Juárez y su enemigo, el cártel de Sinaloa que dirige Joaquín 'el Chapo' Guzmán, uno de los capos más poderosos y buscados del mundo.