Actualizado 29/04/2010 21:15

México/EEUU.- La policía de Phoenix comenzará mañana un ciclo de redadas para detener indocumentados


MÉXICO DF, 29 Abr. (EUROPA PRESS) -

El comisario del condado de Maricopa, en la ciudad de Phoenix, en el sur del estado de Arizona, Joe Arpaio, anunció que el próximo viernes se iniciará un ciclo de redadas contra indocumentados en cumplimiento de la norma aprobada el pasado 23 de abril que permite a las fuerzas de seguridad detener a los extranjeros que consideren sospechosos de ser ilegales.

Las autoridades de Arizona indicaron que esta redada, la decimoquinta desde 2008, se llevará a cabo en la capital estatal y en sus suburbios, aunque no detallaron las zonas. Según informaron, el objetivo de esta medida es detener a los contrabandistas que estén en el estado de forma ilegal y localizar los zulos donde se oculta a los indocumentados, indicó la prensa mexicana.

La directora ejecutiva de la Coalición Pro Derechos Humanos de los Inmigrantes en Los Ángeles, Angélica Salas, denunció que, de acuerdo a experiencias anteriores, en estas redadas los funcionarios arrestan a cualquier persona con aspecto hispano. Salas puso de ejemplo las del 12 y el 17 de abril cuando varios agentes de inmigración participaron en las movilizaciones.

La activista señaló que estas redadas son una iniciativa personal de Arpaio que "aterrorizan a los inmigrantes" y afectan a los negocios locales. "El sheriff se esconde tras el escudo de la policía, para avanzar en agendas reivindicatorias de valores no relacionados con la seguridad", apuntó en declaraciones a la prensa.

En señal de protesta por estas medidas el pasado domingo miles de manifestantes --entre ellos Organizaciones de inmigrantes, agrupaciones latinas, líderes religiosos y sindicalistas-- marcharon pacíficamente por Phoenix en contra de la aprobación de la ley Arizona.

También elevó su queja el presidente de México, Felipe Calderón, quien calificó la norma de "inaceptable" por considerar que "abre las puertas a la intolerancia, al odio y a la discriminación racional".

En la misma línea, el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, aseguró que se trata de una ley "discriminatoria" que excede el derecho de cualquier país a legislar dentro de su territorio en materia de inmigración.

"Todos los países tienen por cierto el pleno derecho a regular la inmigración dentro de sus países, pero no a costa de no respetar los Derechos Humanos, los derechos de las personas y de crear estereotipos raciales que no corresponden a la realidad", sostuvo el chileno.