Actualizado 10/02/2006 00:55

México.- México no permitirá aplicar de leyes extranjeras en su territorio pero no enviará una nota diplomática a EEUU


CIUDAD DE MÉXICO, 9 Feb. (EUROPA PRESS) -

El ministro mexicano de Asuntos Exteriores, Luis Ernesto Derbez, aseguró hoy que "la extraterritorialidad" de las leyes de de Estados Unidos "no está siendo aceptada ni lo será en México", lo cual no implicará que el país centroamericano envíe una nota diplomática al Gobierno de Estados Unidos.

Según dijo Derbez en rueda de prensa, Estados Unidos no violó la soberanía nacional en el caso de los 16 funcionarios cubanos expulsados el pasado viernes del hotel María Isabel Sheraton de la capital mexicana.

Afirmó asimismo que en este caso el Gobierno de México actúa conforme al derecho e indicó que no reaccionará a lo que publique la prensa, sino a lo que establece la 'Ley de protección al comercio y la inversión de normas extranjeras que contravengan el derecho internacional' según recoge la agencia mexicana 'Notimex'.

"No vamos a reaccionar únicamente porque haya cabezas de periódicos, y lo que tenemos que hacer y los mexicanos tenemos que aprender, es a respetar la ley y el proceso que marca esta legislación", sostuvo el responsable diplomático mexicano.

Este tema "no será motivo de un conflicto diplomático entre Estados Unidos y México", ya que la instrucción que siguió el hotel provino de una ley que no es la Helms-Burton, sino de una legislación americana que data desde 1963, que se refiere a la 'Ley de regulación para el control de activos cubanos', según explicó el ministro.

Asimismo Derbez aseguró que el caso ya se ha puesto en manos de las autoridades competentes de México, que serán las que decidan si se violó la ley mexicana y procedan como corresponda, tanto si decide o no la clausura del establecimiento.

El Sheraton expulsó de sus instalaciones a una delegación de 16 funcionarios cubanos el pasado 3 de febrero. Los cubanos participaban en una reunión con empresarios estadounidenses sobre el potencial del mercado petrolero de la isla y fue el Departamento del Tesoro estadounidense el que solicitó la expulsión al hotel.