MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
Unos 3.000 jóvenes se han manifestado en Guadalajara, México, por tercer día consecutivo para pedir justicia por la muerte del obrero Giovanni López durante una detención policial y exigir la liberación de los manifestantes detenidos en los últimos días.
La movilización este sábado se ha desarrollado de forma pacífica y ha recorrido la distancia que separa la Glorieta Minerva de la Plaza de Armas, frente a Palacio de Gobierno del estado de Jalisco.
En torno al Palacio de Gobierno se había desplegado un importante dispositivo de seguridad integrado por mujeres policías municipales de Guadalajara, Protección Civil y policía vial, desarmadas, sin cascos ni escudos.
Los manifestantes se concentraron en el kiosko de la plaza, guardaron un minuto de silencio y levantaron el puño para exigir justicia por la violencia policial.
Las protestas comenzaron el pasado jueves con motivo de la muerte de López, un obrero de 30 años fallecido tras ser detenido por policías del municipio de Ixtlahuacán de los Membrillos, a las afueras de Guadalajara.
Los hechos se remontan al 4 de mayo cuando, según un vídeo difundido por el periódico mexicano 'Milenio', hasta diez agentes "golpearon y sometieron" a López, que "al día siguiente apareció muerto".
La familia de la víctima recogió su cuerpo en el Hospital Civil de Guadalajara, "donde confirmaron que murió por traumatismo craneoencefálico, tenía huellas de tortura y una herida de bala en la pierna izquierda".
De acuerdo con la familia, el alcalde Ixtlahuacán de los Membrillos, Eduardo Cervantes Aguilar, a través de otra persona, se puso en contacto con ellos para pedirles no hacer público el vídeo de la detención a cambio de 200.000 pesos mexicanos (unos 8.000 euros). Por su parte, el regidor local asegura que no estaba al corriente de los detalles del suceso.