Tanzania despliega soldados para garantizar la seguridad en la frontera con Mozambique
MADRID, 7 May. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno estadounidense ha reconocido su preocupación por la creciente actividad yihadista en el norte de Mozambique, donde la filial de Estado Islámico en África Central (ISCA) ha reivindicado ataques en los últimos meses, y ha confiado en que el Ejecutivo de Filipe Nyusi sepa actuar para hacerle frente.
"La insurgencia en el norte de Mozambique es muy preocupante", ha reconocido el secretario de Estado adjunto para África, Tibor Nagy, en un encuentro telefónico con periodistas. "Ha pasado de ser un movimiento muy pequeño a un movimiento mucho más grande en el último año o año y medio", ha añadido.
El norte de Mozambique, principalmente la provincia de Cabo Delgado, ha sido escenario de ataques islamistas desde octubre de 2017. Inicialmente atribuidos a un grupo conocido popularmente como Al Shabaab --pero sin ninguna relación con el grupo somalí del mismo nombre vinculado a Al Qaeda--, en los últimos meses han cobrado intensidad y sofisticación.
Desde que en junio Estado Islámico anunció su filial en la zona, el grupo estaría detrás de una treintena de ataques, incluida la toma durante unas horas de la ciudad de Mocimboa da Praia a finales de marzo, donde llegó a izar su famosa bandera negra.
"Esperamos que Mozambique preste plena atención a abordar esto de una forma muy sistemática", ha confiado Nagy, que ha subrayado que ya en otras ocasiones ha comparado la situación "con la emergencia de Boko Haram en Nigeria".
"Boko Haram era solo un pequeño movimiento y debido al modo en el que el Gobierno nigeriano respondió inicialmente, creció hasta convertirse en una amenaza muy grave, no solo en el noreste de Nigeria, sino para los países vecinos", ha lamentado el diplomático estadounidense.
Por ahora, ha destacado, la insurgencia en Cabo Delgado "está en una zona muy aislada del país" y que es "la más remota desde Maputo", la capital, pero que también hace frontera con el sur de Tanzania, una zona que a su vez es también "la más remota" del país.
Así pues, ha indicado Nagy, la Embajada estadounidense, "junto con algunos socios, está plenamente implicada con el Gobierno mozambiqueño para discutir la mejor manera de responder con el fin de evitar que la insurgencia se convierta en el tipo de amenaza que Boko Haram se ha convertido en Nigeria".
El Gobierno de Mozambique había optado en buena medida por restar importancia a los acontecimientos en Cabo Delgado, pero finalmente el mes pasado reconoció que Estado Islámico estaba detrás de algunos de los ataques registrados.
TANZANIA ENVÍA AL EJÉRCITO A LA FRONTERA
Entretanto, el Gobierno de Tanzania ha informado este jueves del envío de soldados a la frontera con Mozambique para reforzar la seguridad. Según ha explicado la ministra de Estado en la oficina del primer ministro Jenista Mhagama, los efectivos han sido enviados para contener la amenaza de seguridad.
Según ha explicado, los refuerzos se enviaron en marzo a Msimbati y Sindano, en la región de Mtwara, así como a Chiwindi, en la región de Ruvuma, "para reforzar la seguridad a lo largo de los 1.536 kilómetros de frontera con Mozambique, Malaui y Zambia", informa el diario local 'The Citizen'.