MADRID, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -
Al menos siete presuntos miembros del grupo yihadista Boko Haram han muerto este viernes en enfrentamientos con el Ejército tras un ataque contra un convoy en el que viajaban comisionados del estado nigeriano de Borno (noreste), según han recogido los medios locales.
Los atacantes abrieron fuego contra el convoy, en el que viajaban los comisionados de Justicia, Reconstrucción y Reasentamiento y Gobierno Local, quienes han resultado ilesos. Los enfrentamientos se han saldado además con tres militares heridos.
El incidente ha tenido lugar en la carretera que conecta las localidades de Monguno y Nganzai y, según las informaciones recogidas por el diario nigeriano 'Daily Post', los comisionados habían salido de Monguno, donde fueron a distribuir ayuda entre desplazados internos a causa de la violencia.
Horas antes, Boko Haram había reclamado la autoría del derribo de un avión de la Fuerza Aérea que se estrelló esta semana en el estado de Borno, lo que ha sido tildado de propaganda por parte de la Fuerza Aérea. Borno ha sido escenario de un repunte de los ataques yihadistas durante los últimos meses.
Las autoridades de los países de la región utilizan el nombre de Boko Haram para referirse indistintamente a la facción encabezada por Abubakar Shekau y la reconocida como rama del grupo yihadista Estado Islámico en la región, ISWA.
Aunque el presidente nigeriano, Muhammadu Buhari, llegó a dar por derrotado a Boko Haram y el Ejército ha intensificado sus acciones en la zona del lago Chad donde opera, lo cierto es que, tanto la facción que lidera Shekau como ISWA, han recrudecido en los últimos meses sus acciones. También han llevado a cabo ataques en Camerún, Chad y Níger.
Por otra parte, al menos siete miembros de las fuerzas de seguridad y siete civiles murieron el 31 de marzo en un ataque perpetrado por varios cientos de 'bandidos' contra la localidad de Shiroro, situada en el estado de Níger (oeste), tal y como ha recogido la agencia estatal nigeriana de noticias, NAN.
El gobernador del estado, Abubakar Sani-Bello, ha condenado este sábado el ataque, en el que fue incendiada una base militar. "El Ejército ha evacuado los cadáveres de los valientes oficiales muertos en el enfrentamiento con bandidos y se han retirado para reorganizar la estrategia. No se han ido ni abandonado a las comunidades", ha añadido.
Los ataques en Nigeria, anteriormente centrados en la zona noreste del paísm se han extendido durante los últimos meses a otras zonas del norte y el noroeste, haciendo saltar las alarmas por la posible expansión de estas redes terroristas y criminales.