UTOYA (NORUEGA), 5 Nov. (DPA/EP) -
El presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, ha conmemorado este viernes la matanza que tuvo lugar hace ya diez años en la isla noruega de Utoya, un ataque terrorista que se saldó con 69 muertos y se produjo horas después de un atentado con coche bomba registrado en Oslo, donde murieron otras ocho personas.
"Este lugar es un lugar de luto, pero también es primariamente un lugar para la esperanza", ha aseverado Steinmeier, que ha aplaudido que miles de jóvenes acudan cada año a la isla para participar en eventos a favor de la libertad y la democracia.
Así, ha celebrado que Noruega haya lidiado con la tragedia "no solo de forma impresionante sino también conmovedora".
Por su parte, el primer ministro noruego, Jonas Gahr Store, ha manifestado que "se trata de uno de los lugares más poderosos del país, un taller de democracia para los más jóvenes".
En julio de 2011, el autor de los ataques, Anders Behring Breivik, de ideología ultraderechista, hizo detonar un coche bomba en el distrito gubernamental de Oslo, que causó la muerte de ocho personas.
Después condujo hasta la isla de Utoya, donde fingió ser un agente de Policía y comenzó a disparar a los participantes del campamento estival anual para las juventudes del Partido Laborista. Allí mató a 69 personas, mayormente adolescentes y adultos jóvenes.
Breivik citó como motivos de sus actos el extremismo de ultraderecha e islamofobia y fue condenado en 2021 a un máximo de 21 años de prisión, con una pena mínima de diez años.