MADRID, 27 Sep. (EUROPA PRESS) -
La viceministra de Economía de Países Bajos, Mona Keijzer, ha renunciado este lunes a su escaño y ha anunciado su salida de la esfera política tras ser cesada por criticar el uso del pasaporte COVID y su obligatoriedad para acceder a restaurantes, bares y teatros.
"Las personas que me conocen o con las que hemos trabajado juntos saben que desde hace tiempo dudo de la eficacia y proporcionalidad de las medidas utilizadas en la lucha contra la COVID-19. El Gobierno debe mostrar moderación", ha aseverado antes de matizar que "la Constitución establece que el Gobierno puede intervenir solo cuando sea necesario".
La política holandesa ha señalado, además, que las medidas tomadas por el Gobierno el pasado mes de marzo estaban justificadas, pero ha matizado que ahora, con el 85 por ciento de la población vacunada, no son necesarias, según informaciones del diario 'Telegraaf'.
"Por eso decidí, a petición de mi facción parlamentaria, renunciar a mi escaño en el legislativo. No quiero seguir provocando discordias, aprecio mucho la ideología demócrata cristiana", ha aseverado. El primer ministro interino de Países Bajos, Mark Rutte, anunció la semana pasada la introducción de los pases COVID para acceder a restaurantes, bares y cafeterías.
Rutte explicó el sábado que la decisión fue tomada tras mantener contactos con el ministro de Economía, Eric Wiebes, y los tres vice primeros ministros que representan a los otros tres partidos de la coalición de gobierno.
En diciembre Keijzer ya cuestionó el cierre de comercios durante el confinamiento y en marzo todo el Ejecutivo tuvo que someterse a la prueba del coronavirus después de que ésta diera positivo tras un consejo de ministros.