WELLINGTON, 28 Ene. (DPA/EP) -
La primera ministra laborista de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, ha anunciado este martes la convocatoria de nuevas elecciones para el próximo 19 de septiembre, en las cuales el Partido Nacional parece partir con una ligera ventaja.
"Le pediré a los neozelandeses que continúen apoyando mi liderazgo y la dirección actual del Gobierno, que se ha basado en la estabilidad, en una economía sólida y en el progreso en los desafíos a largo plazo", ha defendido Ardern a través de un comunicado.
Las elecciones se celebran en la isla cada tres años salvo que se convoquen de manera anticipada. En 2017, Ardern tuvo que asumir el cargo del Partido Laborista siete semanas antes de que se celebraran los comicios tras la renuncia ante la falta de confianza del que era el jefe de la formación, Andrew Little.
Su "implacable positivismo" cautivó al electorado y aunque su partido sólo obtuvo el segundo mayor número de escaños detrás de su rival tradicional, el Partido Nacional, fue Ardern quien logró llegar a un acuerdo con los nacionalistas populistas de Nueva Zelanda Primero y los ecologistas del Partido Verde para ponerse al frente del país.
No obstante, y pese a contar con destacadas cifras de popularidad en las últimas encuestas, es el Partido Nacional quien lidera la intención de voto para las próximas elecciones con un 46 por ciento, frente al 39 del Partido Laborista que aún uniéndose a los verdes, con un 7 por ciento en intención de voto, no contarían con una ventaja suficiente para revalidar el actual signo del Gobierno.
Por su parte, el partido antiinmigración Nueva Zelanda Primero, que cuenta con una intención del 4 por ciento, se sumaría a la pequeña formación libertaria ACT Nueva Zelanda, que cuenta con el 2, para dar su apoyo a los conservadores del Partido Nacional.