Publicado 12/11/2019 23:24

La ONU dice que mantiene contactos "nacionales e internacionales" para "ayudar a calmar la situación" en Bolivia

Policías custodian la sede de Gobierno en Bolivia
Policías custodian la sede de Gobierno en Bolivia - REUTERS / DAVID MERCADO

MADRID, 12 Nov. (EUROPA PRESS) -

Naciones Unidas ha asegurado este martes que está en contacto con "interlocutores nacionales e internacionales" para "ayudar a calmar la situación" en Bolivia, sumido en una grave crisis política tras la dimisión de Evo Morales por el supuesto fraude en las elecciones presidenciales del pasado 20 de octubre.

"Lo más importante ahora mismo es evitar un mayor recrudecimiento y adoptar todas las medidas para crear las condiciones para celebrar lo antes posible unas elecciones pacíficas, creíbles, transparentes e inclusivas", ha dicho Farhan Haq, portavoz de la Secretaría General de la ONU.

Asimismo, ha señalado que "la situación sobre el terreno es fluida" y ha agregado que el organismo internacional "está profundamente preocupado por la situación" en el país sudamericano.

Bolivia está sumido en una profunda crisis desde las elecciones presidenciales del 20 de octubre. Los resultados oficiales dieron la victoria a Morales, pero Carlos Mesa, principal candidato opositor, denunció un "fraude gigantesco" del Gobierno para garantizar un cuarto mandato al líder indígena.

Ambos bandos llamaron a la movilización de sus simpatizantes, lo cual derivó en enfrentamientos, bloqueos y saqueos que se han saldado con al menos tres muertos y cientos de detenidos.

En este contexto, Morales accedió a que la Organización de Estados Americanos (OEA) hiciera una auditoría electoral que finalmente ha confirmado irregularidades. En respuesta, el aún presidente aceptó celebrar nuevas elecciones, pese a lo cual tanto la Policía como las Fuerzas Armadas le "sugirieron" que dimitiera.

Morales renunció al cargo el domingo, después de catorce años en el poder, y el lunes por la noche (hora local) embarcó en un avión rumbo a México. El ya expresidente --que este mismo martes ha llegado a México en calidad de asilado político-- y sus aliados denuncian un "golpe de Estado".