La ONG se muestra "consternada" por "la destrucción de infraestructuras civiles" y recuerda que "los niños son los que más sufren en cualquier guerra"
MADRID, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -
La organización no gubernamental Aldeas Infantiles SOS ha condenado este martes un ataque aéreo ejecutado contra dos apartamentos en los que daba alojamiento a familias palestinas en situación de vulnerabilidad en la Franja de Gaza, en el marco de los bombardeos israelíes contra el enclave tras los ataques lanzados el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
La ONG ha indicado en un comunicado que sendos apartamentos han quedado completamente destruidos y ha detallado que las personas que estaban alojadas en ellos ya habían sido reubicadas en otro lugar más al sur, por lo que el suceso se ha saldado sin víctimas. Así, ha condenado los ataques contra infraestructura civil y ha recordado que lamenta la muerte desde el 7 de octubre de varios niños, jóvenes y familias relacionados con sus programas en Gaza e Israel.
"Estamos trabajando duro para garantizar la seguridad del mayor número posible de niños, niñas y familias en nuestros programas en Gaza. Estamos desolados por las vidas perdidas y los heridos", ha dicho la directora general de la organización, Ingrid Johansen.
"También estamos consternados por la destrucción de infraestructuras civiles, incluidos los apartamentos en los que vivían familias apoyadas por nuestros programas antes de que comenzara el conflicto", ha apuntado, antes de recordar que la ONG "trabaja en Gaza para ayudar a algunos de los niños más vulnerables: los que han perdido el cuidado de sus padres o corren el riesgo de perderlo".
En este sentido, Johansen ha resaltado que "los niños son los que más sufren en cualquier guerra". En el caso de la Franja, Aldeas Infantiles SOS opera en la zona desde hace más de 50 años dando atención y apoyo a niños, jóvenes y familias en situación de vulnerabilidad.
Según la organización, la instalación que tiene en Rafá, situada en la frontera con Egipto, se enfrenta a una "amenaza inminente" para la seguridad de su personal y de los 75 niños y niñas que residen en ella. Así, ha manifestado que si bien todos ellos se encuentran bien, hacen frente a un acceso limitado a agua y alimentos.
Un trabajador de la ONG en el lugar ha detallado que "se escucha el sonido de los bombardeos durante todo el día", por lo que "los niños y las niñas están nerviosos y temen perder a sus familiares y amigos". "Están bajo mucha presión", ha destacado.
"Hasta ahora la situación de los niños, los cuidadores y el personal es estable, pero ningún lugar es seguro en Gaza, incluso los refugios de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA) --que ha denunciado hasta ahora la muerte de 35 de sus trabajadores-- han sido bombardeados", ha señalado.
Por último, este trabajador ha incidido en que "la Aldea Infantil SOS de Rafá tiene comida suficiente para un mes más", si bien ha alertado de que "la situación dista mucho de ser segura" a causa del conflicto desatado por los citados ataques del 7 de octubre, lanzados desde la Franja contra territorio israelí.
Los ataques de Hamás se saldaron con cerca de 1.400 muertos y más de 220 secuestrados. Por su parte, las autoridades de la Franja, controlada por el grupo islamista, han confirmado más de 5.000 palestinos muertos, que se suman a más de 90 en operaciones de las fuerzas de seguridad y ataques de colonos en Cisjordania.