MADRID 16 May. (EUROPA PRESS) -
Colonos israelíes han asaltado esta pasada noche varias localidades de la gobernación cisjordana de Salfit, en el centro del territorio palestino, escenario en las últimas noches de un recrudecimiento de estos ataques en una tensión entremezclada con el asesinato de una mujer israelí embarazada en un ataque a tiros que las autoridades israelíes atribuyen a un palestino.
Los ataques de los colonos en Salfit durante las últimas 48 horas se han caracterizado por el lanzamiento de cócteles molotov contra viviendas de familias palestinas por parte de los civiles israelíes mientras el Ejército efectuaba operaciones de registros domiciliarios, según activistas a la agencia oficial de noticias palestina Wafa.
Más de 14 vehículos palestinos han acabado calcinados en las inmediaciones del asentamiento de Ariel, según la agencia oficial palestina.
Los ataques de esta pasada noche en Salfit han ocurrido tras la muerte a tiros de una mujer israelí embarazada, identificada como Tzala Gal, en el asentamiento de Bruchin, en el norte de Cisjordania. Su marido resultó levemente herido en el ataque.
El bebé acabó naciendo tras un parto forzado después de un asalto que todavía no ha arrojado detenidos y que ha sido condenado entre otros por el Ministerio de Exteriores de Francia, que ha "ofrecido sus condolencias a la familia de la víctima, así como sus deseos de una pronta recuperación para la persona herida y el recién nacido".
Fuentes de la también agencia palestina Sanad han informado de la instalación de tiendas de campaña por parte de los colonos israelíes justo al noroeste de este asentamiento, entre las poblaciones palestinas de Shaab y Jalayel, donde además varias excavadoras israelíes se han instalado en las cercanías de las rutas entre las dos localidades.
En un comunicado posterior, el movimiento islamista Hamás ha condenado los "ataques criminales" de estas "bandas de colonos respaldadas por el Ejército de ocupación y bajo la cobertura de un gobierno sionista extremista".
Hamás no ha abordado el tiroteo que ha costado la vida a la mujer israelí en Burchin y se ha limitado a denunciar "la continua demolición y destrucción de tierras" en esa zona que refleja una peligrosa escalada en el contexto del proyecto expansionista de asentamientos.
"Elogiamos la vigilancia de los residentes y los esfuerzos de los voluntarios de la Media Luna Roja y la Defensa Civil, que hicieron frente a los ataques a pesar de los obstáculos de la ocupación", ha añadido Hamás, antes de llamar a los palestinos a redoblar "su resistencia por todos los medios" contra "la ofensiva de los colonos y los planes de la ocupación de robar tierras y desplazar a la población".