JERUSALÉN, 16 Feb. (DPA/EP) -
El Ejército de Israel ha anunciado este domingo que ha desbaratado una operación informática del movimiento islamista Hamás por la que efectivos de la organización consiguieron acceder temporalmente a los teléfonos móviles de miles de soldados, aunque sin llegar a obtener información sensible.
El movimiento islamista tenía por objetivo final conseguir información de inteligencia sobre las operaciones militares israelíes, según ha informado el portavoz militar, coronel Jonathan Conricus.
Los propios militares afectados informaron al alto mando de "actividad sospechosa" en sus móviles cuando empezaron a recibir imágenes de "jóvenes atractivas" que resultaba ser personas ficticias.
A continuación, estas jóvenes pedían a los militares que se descargaran una aplicación para intercambiar fotos. Estos programas servían de "caballo de Troya" para acceder al resto de contenidos de los teléfonos.
"Hamas creó perfiles falsos de redes sociales, utilizando fotos incluyendo esta, en un intento de piratear los teléfonos de los soldados de las Fuerzas de Defensa de Israel", ha explicado posteriormente el Ejército en su cuenta de Twitter, en un mensaje acompañado de la imagen de una joven sacándose un 'selfie' frente al espejo.
"Lo que Hamas no sabía era que la inteligencia israelí se enteró de su trama, rastreó el programa malicioso y derribó su sistema de piratería", según el Ejército, en lo que se ha tratado del tercer intento de estas características en los últimos tres años y medio, más sofisticado que los anteriores.
"Está claro que (Hamás) aprenden y que cada día son mejores", ha indicado Conricus. Por ejemplo, para esconder su mal uso del hebreo, las jóvenes se presentaban como "inmigrantes judías" que llegaban incluso a usar porciones de argot lingüístico para convencer a los militares. Hamás, por vez primera, ha empleado aplicaciones de mensajería instantánea como Whatsapp o Telegram.
El portavoz militar ha indicado que la operación de Hamás "no ha alcanzado información esencial", por el momento, pendiente de más investigaciones.