MADRID, 1 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Revolucionaria de Irán ha afirmado este jueves que el plan de Estados Unidos de crear una misión naval internacional en el estrecho de Ormuz está destinado al fracaso, según ha informado la cadena de televisión local Press TV.
"El enemigo debería saber que no puede hacer nada. Como coaliciones previas, y también esta, será una ruina y no podrá materializarse", ha dicho el vicepresidente para Asuntos Políticos de la Guardia Revolucionaria, Yadolá Yavani.
"La seguridad de la región es garantizada por sus países, Irán y nuestras fuerzas Armadas", ha recalcado, tal y como ha recogido la agencia iraní de noticias Tasnim.
El ministro de Exteriores alemanán, Heiko Maas, anunció el miércoles que Berlín no participará en la misión. Horas antes, el vicecanciller y ministro de Finanzas de Alemania, Olaf Scholz, había considerado que la propuesta estadounidense "no es una buena idea" y defendió que lo más importante es evitar una escalada militar en la región.
Por su parte, España no contempla, por el momento, sumarse a coalición que, según ha dicho a Europa Press un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación.
El Gobierno español ha recibido una petición formal de sumarse a esa misión, pero la está estudiando y observando también las reacciones de otros socios europeos, y de momento no se plantea sumarse a la iniciativa.
En los últimos meses se han registrado varios incidentes en este canal de navegación, clave para el comercio internacional y especialmente para el tráfico de combustible.
Así buques emiratíes y saudíes han sufrido "sabotajes" que ambos países han atribuido a Irán, mientras que la República Islámica ha apresado a varios petroleros.
La tensión de ha disparado coincidiendo con el primer aniversario de la retirada de Estados Unidos del acuerdo nuclear firmado en 2015 por las potencias mundiales e Irán para que el país limitara el desarrollo de su industria atómica a cambio del levantamiento progresivo de las sanciones internacionales.
Los demás firmantes --Reino Unido, Francia, Alemania, Rusia y China-- han intentado mitigar el efecto de la retirada estadounidense, pero Irán lo considera insuficiente y ha comenzado a enriquecer y almacenar uranio por encima de los niveles permitidos por el acuerdo nuclear, aunque aún lejos de los necesarios para conseguir armas atómicas.