MADRID, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -
El comisionado general de la Agencia de la ONU para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA), Philippe Lazzarini, ha advertido sobre el "riesgo real" que supondría para más de 600.000 refugiados palestinos el colapso financiero de la organización, que tendría que suspender sus servicios en Jerusalén Este, Gaza, Siria, Líbano y Jordania.
"La reunión debería servir como una advertencia temprana del desastre que se avecina en septiembre si no recibimos fondos adicionales. Nuestro presupuesto es ajustado y no puede reducirse más si queremos cumplir con nuestro mandato", ha afirmado Lazzarini durante una reunión para pedir nuevos fondos.
El comisionado ha asegurado que, sin "fondos adicionales inmediatos", la UNRWA no podrá mantener sus servicios a partir de septiembre y se cerrarían más de 700 colegios y 140 centros de salud, además de la paralización de los servicios de emergencia, por lo que ha pedido solidaridad con los refugiados palestinos.
"Los servicios de emergencia en todas nuestras áreas de operación se paralizarán, dejando a millones de refugiados palestinos, que dependen de la asistencia de la UNRWA, al borde de la inanición. Este no es el momento de vacilar. Ha llegado el momento de actuar", ha asegurado Lazzarini en declaraciones recogidas en un comunicado.
"Las implicaciones humanas, políticas y de seguridad del callejón sin salida al que nos dirigimos son enormes. Nuestra responsabilidad hacia los refugiados palestinos es liderar la transformación de UNRWA para convertirla en una agencia sostenible que apoye los derechos de los refugiados palestinos. Mi prioridad sigue siendo acompañar responsablemente esta transformación", ha añadido.
La UNRWA solo ha recibido 13 millones de dólares (unos 11,8 millones de euros) de fondos nuevos de los 300 millones de dólares (2,7 millones de euros) necesarios para cubrir "sus necesidades básicas y de emergencia más urgentes". Durante los últimos diez años ha sufrido una "financiación insuficiente crónica", e inició 2023 con deudas de más de 75 millones de dólares (unos 68 millones de euros).