Publicado 31/05/2021 14:15

Pakistán.- Apartado de su programa un destacado periodista tras sus críticas al Ejército de Pakistán

Archivo - Dos soldados paquistaníes con mascarilla
Archivo - Dos soldados paquistaníes con mascarilla - HASNAIN ALI / ZUMA PRESS / CONTACTOPHOTO - Archivo

MADRID, 31 May. (EUROPA PRESS) -

Las autoridades de Pakistán han prohibido a un destacado periodista seguir encabezando un programa de televisión tras sus críticas al Ejército después de que un reportero crítico con las Fuerzas Armadas fuera agredido la semana pasada frente a sus vivienda en la capital, Islamabad.

El periodista, Hamid Mir, ha dicho a través de su cuenta en la red social Twitter que la decisión de prohibirle seguir al frente de su programa en la cadena de televisión Geo TV "no es nada nuevo".

"Sufrí prohibiciones dos veces en el pasado. Dos veces perdí el trabajo. Sobreviví a intentos de asesinato, pero no van a impedir que alce la voz por los derechos contemplados en la Constitución", ha resaltado.

"Esta vez estoy preparado para hacer frente a cualquier consecuencia e ir hasta el final, porque están amenazando a mi familia", ha dicho Mir, quien sobrevivió en 2014 tras recibir seis disparos efectuados por una persona no identificada.

La organización no gubernamental Amnistía Internacional ha criticado las "acciones punitivas" contra el periodista tras sus críticas al Ejército después de la agresión sufrida por Asad Alí Tur y ha resaltado que las autoridades "deben proteger la libertad de expresión en un ambiente ya represivo".

"La censura, el acoso y la violencia física no deben ser el precio que pagan los periodistas por hacer su trabajo", ha manifestado Amnistía Internacional, que ha agregado además que este tipo de medidas "socavan gravemente" a los medios de comunicación en el país centroasiático.

Por su parte, la Comisión de Derechos Humanos de Pakistán (HRCP)ha condenado "firmemente" la decisión y ha destacado que "Mir estuvo en lo correcto al mostrar su preocupación sobre la seguridad de sus colegas tras el ataque atroz contra Asad Alí Tur".

"El hecho de que Mir haya sido silenciado rápidamente y que su familia supuestamente haya recibido amenazas es un punto de inflexión para la libertad de prensa, uno que no se resolverá a través de la óptica de la generación de leyes como la fuertemente criticada Ley de Protección a los Periodistas", ha argüido.

Por ello, la HRCP ha reclamado que "se permita a Mir reiniciar inmediatamente sus tareas profesionales y que las amenazas contra él sean tomadas en serio y abordadas" por las autoridades y las fuerzas de seguridad.

Los opositores Partido Popular de Pakistán (PPP) y Liga Musulmana de Pakistán- Nawaz (PML-N) han criticado este mismo lunes el proyecto de ley para el Gobierno sobre la regulación de medios, que han descrito como un intento de las autoridades de censurar el trabajo de los periodistas.

La senadora del PPP Sherry Rehman ha dicho a través de Twitter que los medios y ONG ya han hablado de "ley marcial en los medios" ante el proyecto y ha apuntado que se trata de un "plan para centralizar la supervisión de los medios bajo una autoridad draconiana".

"No habrá obligación al Gobierno para dar advertencias o racionalizar las campañas de censura. La ley podría incluso extenderse para controlar plataformas digitales. Es un plan para institucionalizar la censura", ha apuntado.

Por su parte, la portavoz de la PML-N, Marriyum Aurangzeb, ha dicho que la propuesta "es un instrumento draconiano, autoritario, represivo y punitivo para suprimir la libertad de expresión de los medios escritos y electrónicos, además del periodismo ciudadano".

"La PML-N no permitirá bajo ningún concepto esta usurpación de los derechos constitucionales", ha destacado Aurangzeb a través de su cuenta en Twitter, donde ha adelantado que dará en las próximas horas una rueda de prensa para abordar el asunto.

Las denuncias por agresiones contra periodistas y trabajadores de los medios de comunicación críticos con el Ejército han ido al alza desde que el Gobierno de Imran Jan se hiciera con el poder en 2018, tras unas elecciones en las que la oposición denunció irregularidades por parte de las Fuerzas Armadas.