MADRID, 24 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno paquistaní ha puesto este viernes en tela de juicio las acusaciones vertidas por la ONG Transparency International en su índice contra la corrupción, que en su última actualización de este jueves ha colocado al país en el puesto 120 de 180 de los países más negligentes del mundo en este sentido, al cuestionar la imparcialidad de sus criterios.
"Hay un gran interrogante sobre la transparencia de este informe. Es necesario que expongan sus fuentes y sus datos que han empleado como base del documento", ha declarado la asesora Firdus Ashiq Awan en declaraciones al diario 'Dawn'.
La portavoz ha lamentado que Transparency International parece haber ignorado los esfuerzos realizados por el país en los últimos años al bajar tres puestos a Pakistán en su lista. "Son dignos de risa. El hecho de ignorar que los reyes de la corrupción de este país están ahora mismo ante los tribunales deja bien claro que este informe no es ni justo ni transparente".
Según la actualización, de una escala de cero (altamente corrupto) a 100 (muy limpio), a Pakistán se le asignó una puntuación de 32, un punto más bajo que el índice de 2018 y muy por debajo del promedio global de 43.
El informe clasifica a 180 países y territorios según sus niveles percibidos de corrupción en el sector público, basándose en 13 evaluaciones de expertos y encuestas de ejecutivos de empresas.
"Estamos ante un informe sesgado", ha sentenciado la asesora.