Actualizado 13/12/2014 05:35

Martinelli gastó 13,4 millones de dólares para espiar a opositores

El Presidente De Panamá, Ricardo Martinelli.
Foto: EUROPA PRESS/PRESIDENCIA DE PANAMÁ

CIUDAD DE PANAMÁ, 13 Dic. (Notimérica) -

   El expresidente de Panamá (2009-2014) Ricardo Martinelli gastó durante su gestión al frente del Gobierno del país centroamericano unos 13,4 millones de dólares en equipamiento israelí, con capacidad para vigilar computadoras, infiltrar redes de telefonía e interceptar comunicaciones, con el objetivo de espiar a opositores, miembros de su propio partido y a otros ciudadanos panameños.

   Según informa el diario panameño 'La Prensa', la compra de este equipo fue aprobada en mayo de 2010 por la junta directiva del Fondo de Inversión Social (FIS), conocido actualmente como Programa de Ayuda Nacional, y en el acta aparece la firma del ministro de la Presidencia Demetrio Papadimitriu, entre otros.

   Este sofisticado equipo es capaz de interceptar incluso el intercambio de mensajería instantánea, a través de WhatsApp o Blackberry Messenger, además de permitir la grabación de conversaciones privadas, registrar huellas dactilares y analizar comportamiento psicológico de un objetivo humano según su tono de voz.

   La existencia de este equipo, comprado a la empresa israelí M.L.M. Protection, salió a la luz después de que Rolando López, director del Consejo de Seguridad, denunciase su desaparición y acusase por este hecho a su antecesor, Alejandro Garuz --consuegro de Martinelli-- ante la Fiscalía Segunda Anticorrupción.

MARTINELLI ALARDEÓ DE TENER INFORMACIÓN

   A principios de año, el propio Martinelli declaró tener más información sobre Panamá de lo que muchos creían: "Créanme que yo sí tengo el dossier y el pedigrí de todo, de todos en este país. Yo sé que ha hecho cada uno, y que no ha hecho cada uno", dijo a sus diputados y ministros, tal y como recuerda la cadena panamericana TeleSur.

   Tras estas declaraciones, en febrero de 2014, unos meses antes de las elecciones generales, se descubrió a través del hallazgo de una base de datos que la campaña del candidato oficialista, José Domingo Arias, tenía en su poder información personal, laboral, familiar, social y política de todos los ciudadanos panameños.

   Los militantes de Cambio Democrático podían conocer si un panameño era funcionario, su fecha de nacimiento, si era afiliación político y si se beneficiaba de algún programa social del Estado, en un listado en el que se incluía incluso la fotografía de su documento de identidad.