Publicado 29/06/2021 22:45

Paraguay.- La familia de un secuestrado en Paraguay pide a las autoridades no intervenir para que vuelva "sano y salvo"

Archivo - Soldados del Ejército paraguayo.
Archivo - Soldados del Ejército paraguayo. - GETTY IMAGES - Archivo

MADRID, 29 Jun. (EUROPA PRESS) -

La familia de Jorge Ríos, un joven de 23 años secuestrado la noche del lunes 28 de junio por una facción del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), ha pedido este martes a las autoridades "que se aparten del caso" para que le puedan "traer de nuevo sano y salvo" lo antes posible.

En una rueda de prensa celebrada en la finca ganadera que la familia dispone en Ciudad del Este, en el departamento de Alto Paraná, han solicitado a la Fiscalía y a las fuerzas de seguridad "que se aparten del caso".

Al mismo tiempo han pedido a la prensa que no hagan pública la carta y ni tampoco los mensajes de los captores, la Agrupación Campesina Armada (ACA), una facción de la guerrilla del EPP, por temor a que pueda complicar la buena resolución del caso, informa el diario paraguayo 'Última Hora'.

"La familia no va a escatimar esfuerzos para cumplir con lo que esa gente está pidiendo", ha dicho el portavoz de la familia, Carlos Aguilar, quien también ha solicitado a los captores "una prueba de vida", pues han estado recibiendo en las últimas horas llamadas telefónicas de otras personas "que quieren aprovecharse de esta situación".

"Esta es la única manera que tenemos de saber si realmente estamos tratando con las personas que están con Jorgito", ha explicado la familia, que está a la espera de un nuevo contacto para conocer el lugar exacto en el que tendrían que dejar en un plazo máximo de 45 horas los 200.000 dólares que se habrían pedido de rescate.

Jorge Ríos es la quinta persona secuestrada por el EPP desde 2014. Esta semana la guerrilla ha remitido a la familia del expresidente paraguayo Óscar Denis (2012-13), secuestrado en septiembre del año pasado, una nota para que se haga pública, aunque sus hijas han preferido esperar hasta recibir una prueba de vida.

Junto a Denis fue secuestrado también Adelio Mendoza, uno de los trabajadores de su finca ganadera en Amambay, en el este del país, aunque dos días después fue liberado. Los secuestradores pidieron una donación de víveres a las comunidades de la región por valor de dos millones de dólares.