Actualizado 30/06/2012 06:06

Paraguay.- El Gobierno dice que la suspensión de Paraguay del Mercosur es "ilegal, ilegítima" y que "viola el proceso"


ASUNCIÓN, 30 Jun. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno de Paraguay ha afirmado este viernes que la decisión tomada por los países del Mercado Común del Sur (Mercosur) en la que han suspendido temporalmente a Paraguay, hasta que su Gobierno convoque elecciones en las que los ciudadanos puedan elegir "libremente" presidente, es "ilegal, ilegítima" y que "viola el proceso".

A través de un comunicado publicado por el Ministerio de Exteriores paraguayo en su página web, el Ejecutivo del país sudamericano ha argumentado que la decisión "pese a que invoca expresamente el Protocolo de Ushuaia sobre Compromiso Democrático en el Mercosur, fue adoptada sin dar cumplimiento a lo determinado en el Artículo 4 del referido Protocolo, que exige la realización de las consultas pertinentes con el Estado afectado, algo que no se llevó a cabo en lo que respecta a Paraguay".

Asimismo, el comunicado ha destacado que en el país "no se ha producido una ruptura del orden democrático". "Por el contrario, las instituciones democráticas se encuentran en plena vigencia y los derechos y libertades fundamentales están garantizados, en consonancia con lo previsto en los Artículos 1 y 2 del Protocolo de Ushuaia", ha agregado.

Por ello, Asunción ha indicado que la decisión adoptada por el Mercosur "carece de validez formal y material" y ha asegurado que el Gobierno "promoverá las acciones que correspondan para dejarla sin efecto". En este sentido, ha reseñado que "todas las decisiones que dicten o hayan dictado los órganos del organismo latinoamericano sin la presencia y participación de la representación de Paraguay carecen y carecerán de validez jurídica, y no obligarán al país".

"El Gobierno de Paraguay deplora que los otros Estados miembro hayan sancionado al Gobierno y al pueblo paraguayos, para incorporar a un nuevo miembro pleno al Mercosur antes de culminar el trámite legislativo necesario para el efecto, precisamente, en el país sancionado", ha apostillado.

El Parlamento paraguayo aprobó la semana pasada la destitución de Lugo tras un "juicio político" por su responsabilidad en la muerte de 17 personas durante un enfrentamiento entre campesinos y policías en el departamento de Canindeyú (sureste). Su hasta entonces 'número dos', Federico Franco, ha asumido de forma interina la Presidencia entre críticas de la mayoría de países de su entorno.

Las declaraciones políticas de los últimos días se han traducido en la reunión de Mercosur en la expulsión temporal de Paraguay. Por este motivo, no se contentarán sólo con que se celebren elecciones en Paraguay sino que éste proceso deberá estar supervisado por una comisión de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), tal como ha propuesto en Mendoza --punto de encuentro de las dos organizaciones-- el presidente chileno, Sebastián Piñera.

VENEZUELA, PAÍS MIEMBRO

La reunión de Mendoza también ha servido para fijar la incorporación de Venezuela a Mercosur. En concreto, se integrará como miembro de pleno derecho el próximo 31 de julio, en la reunión que la organización celebrará en Río de Janeiro.

Venezuela llevaba seis años lista para entrar al bloque formado por Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay. Era precisamente este último país, ahora suspendido, el que mantenía bloqueado el ingreso venezolano, que ahora ha tenido el camino libre.

Chile, Bolivia, Perú, Colombia y Ecuador colaboran como naciones asociadas con Mercosur y, al igual que los países miembro, también han plasmado sus críticas contra la forma en que se produjo la destitución de Lugo en Paraguay.

Tanto el presidente boliviano, Evo Morales, como el ecuatoriano, Rafael Correa, han reiterado este viernes que no reconocerán al Gobierno de Federico Franco como interlocutor legítimo. Morales, en declaraciones a la cadena Telesur, ha llamado a actuar "en defensa de la democracia y la legitimidad de los gobiernos democráticamente elegidos", pese a sus diferencias con Lugo.

Por su parte, Correa ha rechazado a su llegada a Mendoza los "golpes de Estado enmarcados en la legalidad" y ha reclamado a los países de la Unasur que "estén a la altura de las circunstancias" y aprueben sanciones contra Paraguay.